El ERE machista de Podemos

 


Este lunes Podemos ha cerrado un acuerdo con los trabajadores a los que ha despedido mediante el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que inició a principios de agosto, tras los nefastos resultados electorales obtenidos en las generales del 23J y en las autonómicas y municipales del 28M. La formación morada perdió en mayo más de dos tercios de sus representantes autonómicos, pasando de 47 diputados regionales a 15 y desapareciendo de 5 de las 12 comunidades donde se celebraron los comicios.

Y en julio pasaron de tener 35 diputados a sólo 5 que además estarán dentro del partido liderado por Yolanda Díaz. Esta debacle les ha hecho perder más del 90% de sus ingresos a nivel autonómico y el 70% a nivel nacional, lo que, según ellos, les ha obligado a cerrar ocho sedes territoriales, con el despido de sus trabajadores en AragónAsturiasBalearesCanariasCastilla-La ManchaGaliciaMadrid y Valencia, además de afectar a su sede central.

Aunque Podemos ha declarado en numerosas ocasiones que en España las indemnizaciones por despido son demasiado bajas y en febrero votó a favor de una moción de ERC para recuperar la indemnización de 45 días por año trabajado en caso de despido improcedente, en esta ocasión ha acordado con los trabajadores a los que ha despedido una indemnización menor, de sólo 38 días por año de antigüedad. «Ha sido como negociar con El Corte Inglés», son las palabras con las que desde el comité de empresa describen la dura negociación que han sufrido con su empresario, que no es otro que Unidas Podemos.

Pero más allá de la racanería demostrada, lo que más llama la atención es el aparente machismo demostrado por el partido de Irene Montero y Ione Belarra a la hora de decidir quiénes son los trabajadores que se marchan y con quienes van a seguir contando. Finalmente, Podemos despide al 70% de su plantilla, pero el ERE afecta al doble de mujeres que de hombres.

El 78% de las trabajadoras de su sede central salen de la organización, donde sólo seguirán contando con 28 empleados, de los cuales sólo siete van a ser mujeres frente a 21 hombres que supondrán el 75% de su nueva plantilla, tras pactar la salida de los 44 trabajadores de las distintas sedes autonómicas afectadas y de 33 de los 61 con que contaban en los servicios centrales ubicados en Madrid. De esta forma, Podemos incumple manifiestamente el Plan de Igualdad de sus estatutos, saltándose descaradamente la paridad que exige al resto de empresarios.

No es cierto, como se dice, que dato mata relato. El comportamiento aparentemente machista de Podemos en este ERE no convierte inmediatamente al partido en una institución machista y patriarcal. Puede haber razones que justifiquen que en su sede central hayan despedido a la mayoría de las mujeres, quizá porque ocupaban puestos menos importantes o duplicados, o porque diera la casualidad de que resultasen menos productivas e imprescindibles que los 21 hombres con los que van a seguir contando. Para poder sentenciarlo deberíamos tener muchos más datos e información. Lo que es indudable es que, si les aplicamos a ellos el mismo criterio moral por el que ellos miden a los demás, es imposible que salgan bien parados.

Si a Inditex o a Mercadona, por ejemplo, se les ocurriera hacer un ERE en las mismas condiciones que lo han hecho ellos, todos sabemos ya las bilis que estarían ahora vertiendo MonteroBelarraEcheniqueVerstrynge y el mismo Pablo Iglesias; ese que «azotaría a Mariló Montero hasta que sangrase», manda a callar a Irene Montero tapándole la boca con su mano, y se insinuaba con sus alumnas diciéndoles «voy al baño a refrescarme, te espero ahí». Podemos es un partido machista como fiel imagen de su líder y fundador, el macho alfa de la manada podemita y este ERE no hace otra cosa que confirmarlo.


Publicado el 31/08/2023 en Okdiario

¡Vade retro, Puigdemont!

 


El Papa Francisco ha insistido en numerosas ocasiones para concienciar a los católicos de que «con el diablo no se dialoga». Lo ha hecho en su homilía dominical durante el rezo del Ángelus, comentando el inicio del capítulo cuarto del Evangelio de S. Mateo, donde, en el desierto, Jesús es tentado tres veces por el diablo, pero lo rechaza utilizando la palabra de Dios de las escrituras, sin entrar en diálogo con él ni negociar nada. En una entrevista concedida a la cadena de televisión TV2000 de la Conferencia Episcopal Italiana, Francisco dijo que el demonio no es rojo, no tiene cuernos, ni se parece a un chivo y dio tres pistas para reconocerlo entre nuestros conocidos, porque es educadocharlatán y pesado. La tentación nos invita a retorcer la ley escrita, a darle vueltas para conseguir de forma inmediata unas satisfacciones que nos resultan atractivas. El tentador nos invita a olvidarnos de la ley para conseguir grandes triunfos

Desconozco si Feijóo es católico o no, pero lo que sí se sabe es que el 40% de los católicos practicantes votan a Feijóo, según el barómetro del CIS. Y eso a pesar de que el programa del Partido Popular para las elecciones del 23J sólo planteaba pequeñas reformas en la legislación socialista sobre el aborto y la eutanasia, pero no su derogación. Con todo, teniendo en cuenta las creencias religiosas de sus votantes, Feijóo debería saberse esta lección del Papa Francisco que de tanta utilidad le sería en estos momentos en los que está pensando en sentarse a negociar con los de Puigdemont, ese señor educado, charlatán y muy pesado que se esconde en Waterloo. Con Puigdemont no se dialoga, se le rechaza con lo escrito en la Constitución.

Puigdemont es el líder de los que se ciscan en la ley de leyes. Ni es rojo, ni tiene cuernos, ni se parece a un chivo, más bien parece un oso perezoso con gafas; pero pertenece al mismo partido nacionalista de extrema derecha, racista, xenófobo y supremacista, cuyo anterior líder describe a los no nacionalistas como «carroñeros, víboras, hienas, bestias con forma humana, sin embargo, que destilan odio»; dice que: «España, esencialmente, ha sido un país exportador de miseria, material y espiritualmente hablando»; y define a los independentistas como «gente que ya se ha olvidado de mirar al sur y vuelve a mirar al norte, donde la gente es limpia, noble, libre y culta». Puigdemont pertenece a lo más parecido a un partido nazi que existe hoy en España y con los nazis, igual que con el demonio, no se dialoga, se les rechaza con la Constitución en la mano.

A pesar de las advertencias del hasta hoy líder de los populares catalanes, Alejandro Fernández, quien recuerda a Feijóo el «acoso» sufrido por los constitucionalistas en Cataluña por parte del separatismo para rechazar cualquier acercamiento de los de la calle Génova a la formación del fugado Puigdemont; la cúpula del Partido Popular defiende que el diálogo con Junts se enmarca dentro de la «ronda institucional, lógica y razonable que un candidato a presidir el Gobierno tiene que cumplir» y que, por tanto, el PP va a convocar a todas las fuerzas políticas, excepto a Bildu, cuyos 6 votos dan por inalcanzables, mientras que los 7 de Junts, aún les deben parecer asequibles. Hoy la Mesa del Senado, con mayoría del PP, en vez de rechazar de pleno la pretensión de JuntsPNV e Izquierda Confederal para tener grupo propio, en contra de lo previsto en su Reglamento, ha solicitado un informe jurídico que alargará esta decisión, quizá incluso hasta después de que se lleven a cabo las conversaciones para la investidura. No todo vale, la Constitución son las escrituras de los demócratas y con ella en la mano, Feijóo debe gritar: ¡Vade retro, Puigdemont!


Publicado el 29/08/2023 en Okdiario

Rubiales, Jenni, Tebas y Sánchez


Rubiales se ha plantado ante la Asamblea de la Federación de fútbol y metafóricamente, se ha apretado sus partes bajas con más fuerza que nunca para anunciar a gritos que no va a dimitir. Ha hecho igual que la ministra que ha soltado a cientos de violadores y la vicepresidenta del Gobierno que protegió a un pederasta, aferrarse a su cargo contra todos los que, a los tres, les exigimos su dimisión.

Dice que no dimite pese a que todos le critiquemos por la horrible imagen que dio agarrando su cabeza con las dos manos para plantar un beso en los morros de la futbolista Jenni Hermoso, unos minutos después de lucirse apretándose los testículos en un extraño gesto de celebración del resultado de la final del Mundial de fútbol femenino en el palco del estadio, apenas separado metro y medio de la Reina Letizia y la Infanta Sofía. Y lo que es aún peor, cuando esa misma noche el periodista Juanma Castaño le pide explicaciones en El Partidazo de Cope, responde: «No hagamos caso de los idiotas y de los estúpidos… no estamos para gilipolleces… ni me comentéis cosas de pringados que no saben ver lo positivo. Si hay tontos, que sigan con sus tonterías, pero no les hagamos caso… no estamos para tontos del culo», insultando a quienes le criticamos.

A ver quién se atreve a negar que este tío es un maleducado que avergüenza a cualquiera que piense que alguien así nos representa a todos los españoles en multitud de actos a los que acude como presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). Pero es que en su currículum hay mucho más que esta reciente polémica. Los escándalos le salpican desde que ocupara la presidencia de la RFEF a mediados de 2018, al mismo tiempo que Pedro Sánchez ganaba su moción de censura contra Mariano Rajoy. A Rubiales se le acusa de haberse repartido comisiones millonarias con el futbolista y empresario Gerard Piqué, por conseguir que la Supercopa de España se jugase en Arabia Saudita. Se han filtrado conversaciones privadas de WhatsApp en las que insulta a los clubes Villarreal, Sevilla FC y Valencia CF. Su propio tío denunció que con dinero de la Federación había pagado bacanales a lo Tito Berni en un chalé de Granada. Y muchas más.

Pero no se pueden analizar las polémicas que rodean a Luis Rubiales sin relacionarlas con dos datos fundamentales. En primer lugar, su estrechísima relación con el PSOE y con Pedro Sánchez. El hasta hoy presidente de la federación es hijo del socialista Luis Manuel Rubiales López, que fue alcalde de Motril y delegado de Empleo de la Junta de Andalucía, y al que la justicia procesó por estar implicado en el caso de los ERE. Por este motivo, a nadie extrañó que se publicaran tantos mensajes de WhatsApp entre Rubiales y Sánchez en los que le felicita por sus resultados electorales, sus apariciones en los medios y su gestión.

Tampoco se pueden entender del todo las polémicas que rodean a Rubiales sin mencionar su enfrentamiento con el presidente de la Liga, Javier Tebas. El conflicto entre la Liga, que representa a los clubes profesionales de fútbol, y la Federación, organismo rector del fútbol profesional y amateur, nace de lo que se ha dado en llamar la «guerra del fútbol», por el reparto de los derechos audiovisuales y la fijación de los horarios para sus retransmisiones televisivas. Los clubes profesionales, exceptuando al Real Madrid, apoyan mayoritariamente a la Liga de Tebas, pero todos los clubes pequeños están con la RFEF. Y por eso Luis Rubiales cuenta con el apoyo de 110 de los 140 miembros de la Asamblea de la RFEF, que ha convocado este viernes una Asamblea General Extraordinaria para escenificar su respaldo al que hasta hoy ha sido su presidente y en la que Rubiales ha aprovechado para anunciar que no va a dimitir.

Y ahora, sabiendo que Javier Tebas invierte cada año más de 35 millones de euros en publicidad en los medios, que está totalmente volcado en una guerra contra Luis Rubiales para intentar manejar a su antojo una Federación que mayoritariamente defiende a su presidente, quien tiene fuertes lazos con el PSOE y con Pedro Sánchez, podemos analizar el beso. En el vídeo se ve claramente como Jenni Hermoso palmea en la cintura a Luis Rubiales mientras este la besa y después se marcha sonriendo. Entrevistada esa misma noche por Juanma Castaño, la futbolista dice entre carcajadas que «a mí no me importa, yo soy campeona del mundo y eso es lo que me voy a llevar esta noche… a día de hoy todo va a estar mal visto por los ojos de quien lo mire y yo sólo puedo decir que ha sido el momento de la efusión, que no hay nada más allá y que se va a quedar en una anécdota y ya está, que la gente si le quiere dar bombo se lo va a dar y lo importante es que somos campeonas». Difícilmente nadie puede ver en Jenni a una mujer que se ha sentido agredida sexualmente.

Entre todos han conseguido que la presión haya sido enorme. La extrema izquierda encabezada por la ministra suelta violadores, Irene Montero, y la vicepresidenta que protegió a un pederasta, Yolanda Díaz, se ha lanzado a degüello contra Rubiales, así que la futbolista no ha tenido más remedio que seguirles la corriente para evitar que encima se revuelvan contra ella. Lamentablemente en el mundo del fútbol abundan los personajes como Rubiales, pero hay que recordar que no ha prosperado ninguna denuncia por las supuestas corrupciones de las que se le acusa y que en numerosas ocasiones se ha intentado desprestigiarle, utilizando todo tipo de técnicas mafiosas, entre las que ésta es sólo una más. Si como todos podemos ver, el beso fue consentido, no se puede consentir que la extrema izquierda neo feminista se cobre la cabeza de Rubiales de la mano de Javier Tebas y su influencia mediática.


Publicado el 25/08/2023 en Okdiario

¿Para qué quiere Feijóo ser propuesto por el Rey?


 

«Las cuentas no salen», dijo el coordinador general del PPElías Bendodo, hace apenas seis meses; en relación con la moción de censura de Vox contra Pedro Sánchez, en la que el candidato fue el economista y político Ramón Tamames. Y como las cuentas no salían, Bendodo decía que la moción era «un error claro», «no serviría más que para reforzar al que gane» y, en consecuencia, el Partido Popular se mantendría en la abstención que había anunciado Alberto Núñez Feijóo. Hoy al que las cuentas no le salen es al Partido Popular, que a lo máximo que puede aspirar es a que su candidato reciba los 172 votos favorables del PP unidos a los de VoxCoalición Canaria y UPN. Mientras que, por el contrario, es absolutamente seguro que Feijóo tendrá en contra los 178 votos de PSOESumarERCJuntsPNVBildu y BNG, quienes ya lo han anunciado sin la menor duda.

Por otro lado, Pedro Sánchez tampoco tiene asegurados esos 178 apoyos y existe la posibilidad de que tampoco pueda ser investido. Los representantes de ERCJuntsPNV y Bildu, que han expresado públicamente que votarán en contra de Feijóo, no han asegurado que vayan a hacerlo a favor de Sánchez. Ayer mismo el portavoz del PNV, Aitor Esteban, decía que aún no han recibido ninguna llamada del PSOE, por lo que Sánchez no puede dar por segura la investidura, ya que «todavía hay mucha tela que cortar». Por su parte, el prófugo Carles Puigdemont insiste en que «son necesarios hechos comprobables antes de comprometer ningún voto» de Junts per Catalunya. ERC confirma que Sánchez «no puede dar por descontados los votos a cambio de nada». Y ni siquiera los escaños de su socio, el etarra Otegi los tiene aún comprometidos. Sánchez no tiene asegurada su investidura, pero mantiene abierta una posibilidad que para Feijóo está matemáticamente cerrada.

Conforme a nuestra Constitución, el Rey Felipe VI tiene que proponer un candidato a la Presidencia del Gobierno, previa consulta con los representantes designados por los grupos políticos con representación parlamentaria. Y por primera vez en la historia deberá elegir entre dos líderes que desean ser propuestos: Feijóo, que ha resultado el más votado en las elecciones del 23 de julio, pero del que el Rey tiene certeza absoluta de que no cuenta con ninguna opción a ser investido, porque así se lo ha manifestado el representante del PNV, que es el único partido que podría darle al del PP los votos que le faltan; y Sánchez, que ha quedado segundo en las elecciones, pero ha asegurado a Felipe VI que está «en condiciones» de conseguir los apoyos para la investidura por parte de unos partidos políticos que se niegan a acudir a la audiencia con el Rey, por lo que éste no puede tenerlos en cuenta.

Puestas así las cosas, cualquiera que sea la decisión del Rey tendrá argumentos a favor y en contra y podrá ser criticada, porque los padres de nuestra Constitución no quisieron dejar en su artículo 99.1 ninguna fórmula cerrada que obligara al Rey a proponer al candidato que reuniera determinadas características claramente definidas. En realidad, la trascendencia de esta elección del Rey es mínima ya que, sea quien sea el candidato propuesto, tendrá que enfrentarse a la votación del Congreso y si no la supera, nuestra Constitución prevé que, durante el plazo de dos meses a partir de la primera votación de investidura «se tramitarán sucesivas propuestas» entre los candidatos que deseen intentarlo. Lo que no está claro es por qué Feijóo desea ser propuesto, sabiendo que «las cuentas no salen», dado que lo único que va a conseguir así es darle más tiempo a Pedro Sánchez para seguir negociando con quienes le chantajean exigiendo amnistías, referéndums de independencia, anexión de Navarra al País Vasco y liberación de etarras. A cambio del protagonismo que Feijóo podrá conseguir con su discurso de investidura fallida, concederá a Sánchez más tiempo para negociar las condiciones de la destrucción de España que sus socios le exigen.


Publicado el 22/08/2023 en Okdiario

¡Perded toda esperanza!


 

Lasciate ogne speranza, voi ch’intrate. En La Divina ComediaDante llega acompañado del poeta romano Virgilio a las puertas del infierno, sobre las que leen esta advertencia: ¡Perded toda esperanza los que entráis! Esta inscripción debería haber sido hoy esculpida sobre las puertas del Congreso de los Diputados y a partir de esta misma tarde podría ser el recibimiento que se hiciera en todas nuestras fronteras. Durante al menos los próximos cuatro años, España se va a convertir en un infierno sin esperanza. Dirigida por un psicópata narcisista sin escrúpulos, que gobernará conforme a los deseos de todos los enemigos de la nación, sometido a lo que le exijan comunistas, etarras y golpistas. Y, lo que es peor si cabe, sin una oposición fuerte y unida que esté en condiciones de disputarle el poder para volver a reconducir la situación. Como se dice irónicamente en la Galicia de Feijóo, «menos mal que nos queda Portugal».

¡Perded toda esperanza! La mesa del Congreso será presidida por Francina Armengoluna socialista cuya única virtud es ser más independentista que los catalanes y vascos que la han votado. Una nacionalista extrema, defensora a ultranza de los Països Catalans en los que incluye a Baleares junto a Cataluña y el resto de regiones donde se habla algo parecido al catalán. Propone la celebración de un referéndum de independencia. Defendió abiertamente la celebración de un referéndum vinculante para que la ciudadanía eligiese entre la continuidad de la Monarquía o la República. Es la responsable política de una veintena de casos de abusos sexuales a menores tuteladas por el Consell de Mallorca durante su mandato. Y fue sorprendida de fiesta en un bar, después de las dos de la madrugada, en pleno confinamiento. Sólo milita en el PSOE porque en Baleares le ofrecía más posibilidades de medrar en política.

¡Perded toda esperanza! Después de esta van a venir todas seguidas. Habrá pacto de investidura y Pedro Sánchez renovará su presidencia con los votos con los que ya cuenta desde la moción de censura a los que esta vez se van a añadir los del partido de Puigdemont. Un Gobierno que se publicitará como de progreso a pesar de estar sustentado en los votos de Junts, que es un partido ultranacionalista de extrema derecha, supremacista, racista y xenófobo, que es lo más parecido a un partido nazi que existe hoy en el Congreso. Resultan también imprescindibles para ese Gobierno de progreso los escaños del PNV, el partido nacionalista y tradicionalista fundado por el racista, xenófobo del aún hoy homenajeado Sabino Arana, que se autodefine como democristiano, pero cuyo lema aún sigue siendo «Dios y ley vieja». El progreso a la destrucción de España de la mano de nazis y etarras.

¡Perded toda esperanza! La legislatura será completa, de cuatro años, igual que ha sido el Gobierno de coalición sanchista–comunista. Para ello, un experto en supervivencia Pedro Sánchez se asegurará el respaldo de todos sus socios, dosificando a lo largo de todo el período los compromisos que ha adquirido con ellos y que, finalmente cumplirá uno por uno. Tendremos ministros comunistas que terminarán su proceso de argentinización de nuestra economía; se excarcelarán todos los presos etarras con las reformas legales que sean necesarias; se iniciará el proceso de incorporación de Navarra al País Vasco previsto en la disposición transitoria cuarta de nuestra Constitución; tendremos referéndums de autodeterminación en País Vasco y Cataluña; habrá una nueva Ley de Amnistía que se aplicará a todos los condenados por el golpe de Estado del 1-O. Y Puigdemont volverá impune a España, siendo recibido como un héroe por los suyos.

¡Perded toda esperanza! En 2019, el enfrentamiento entre PP y Vox hizo que Podemos aumentase un puesto en la Mesa del Congreso que podría haber sido para los de Abascal. Hoy se ha vuelto a repetir el mismo error y los de Feijóo se han negado a permitir que el tercer partido más votado lograse algún puesto en la nueva Mesa del Congreso, mientras que el PSOE ha permitido que sus socios de Sumar, cuarta fuerza en las elecciones con dos diputados menos que Vox, consigan obtener dos puestos en dicha mesa. De nada le ha servido a Feijóo el comunicado en el que los de Abascal anunciaron su apoyo incondicional para una investidura que el PP podría negociar sin la excusa de ningún acuerdo previo con Vox. Llegada la hora de la verdad, el PP vuelve a demostrar que todo su esfuerzo se dirigirá de nuevo a luchar contra Vox y que los próximos cuatro años seguiremos sin tener la esperanza de que una oposición unida tenga opciones reales de derogar el sanchismo. Como dijo el ex ministro Pío Cabanillas: «¡Cuerpo a tierra, que vienen los nuestros!».


Publicado el 17/08/2023 en Okdiario

Feijóo debe investir a Sánchez

 


Lo que no son cuentas son cuentos. Las matemáticas son tozudas. Pedro Sánchez puede ser investido de nuevo y Feijóo no tiene ninguna posibilidad de conseguirlo. A lo máximo que puede aspirar el líder del PP es a forzar una repetición de elecciones de alto coste y, visto cómo han votado los españoles el pasado 23 de julio, incierto resultado con mejores opciones para el PSOE que para la oposición. Como mucho, Feijóo podría llegar a sumar 172 votos a favor, con lo que se quedaría cuatro por debajo de los que necesitaría para ser investido. Lograría como máximo esa cifra si finalmente consiguiera el apoyo del diputado de UPN y el más dudoso de Coalición Canaria, ya que todos los demás grupos ya han dejado claro que votarán en su contra. Sin embargo, Pedro Sánchez puede conseguir hasta 179 votos a favor, sumando a los 152 diputados que tienen los actuales socios de GobiernoPSOE y Sumar, los de ERCBilduPNV y BNG, que ya favorecieron su elección en 2019, los siete de Junts per Catalunya y quizá hasta el de Coalición Canaria.

El presidente del Partido Popular debe considerar que tiene por delante sólo dos opciones reales: que Sánchez conceda todo lo que le exigen o que se niegue a hacerlo. Con ellas, Feijóo debe construir un árbol de decisión alternativa, que es el método científico con el que se debe enfrentar una situación así. Para formularlo, el del PP debe asignar la probabilidad con la que él estima que Sánchez logrará el permiso de Puigdemont para renovar su residencia en La Moncloa y con ello tendrá también el porcentaje de expectativas de que se tengan que repetir las elecciones, si es esa la decisión final del nazi fugado a Waterloo. A continuación, Feijóo deberá valorar las consecuencias para España de ambas posibilidades, teniendo en cuenta todo lo que ya sabemos que el socialista deberá entregar a cambio de los votos que le permitan ser investido.

No se pueden exponer aquí todas las cesiones que el presidente en funciones deberá hacer a los partidos que necesita para mantener el poder, pero señalemos algunas de las más relevantes. Bildu ya ha anunciado que exigirá el reconocimiento de Euskal Herria, un referéndum de autodeterminación y la excarcelación de los presos etarras mediante la concesión del tercer grado o la libertad condicional, para lo que Sánchez ya está estudiando las necesarias reformas legales. Por su parte, Junts per Catalunya también ha sido bastante claro, no permitirá la investidura de Pedro Sánchez sin una ley que se traduzca en la amnistía de todos los condenados en las diversas causas derivadas del golpe de Estado del 1-O, así como la celebración de un nuevo referéndum de independencia. En palabras de la condenada Laura Borràs: Junts no investirá «a ningún presidente del Estado español que no aborde la solución del conflicto político con Cataluña, y eso pasa por abordar la amnistía y la autodeterminación».

Pero esto no es todo, aun consiguiendo los votos de los independentistas, Sánchez también tendrá que contentar a los de Yolanda Díaz, manteniendo a Lady Paro como vicepresidenta, haciendo ministra de vivienda a Ada Colau y con todo el desastre que para la economía y la sociedad de cualquier país supone tener a un partido comunista en el Gobierno. La suma de todas las cesiones que tendrá que hacer Pedro Sánchez para ser investido tendrán un coste brutal para el presente y futuro de España y todos sabemos que él es capaz de entregar todo lo que le piden. Y la repetición de elecciones, acontecimiento al que, en mi opinión, Feijóo debería asignar un porcentaje de probabilidad bajo, nos enfrenta a unas consecuencias que incluso podrían llegar a ser peores si cabe, teniendo en cuenta que es difícil que los resultados fueran muy diferentes de los del 23J.

Ante este catastrófico árbol de decisión, la única decisión buena para España que puede tomar Feijóo es ofrecerle a Sánchez los votos del PP y favorecer así su investidura sin cesiones ante independentistas y comunistas. El Partido Popular debería seguir el ejemplo de Vox, que ya ha sacrificado sus ambiciones de poder en aras de facilitar el bien común. En todas las democracias europeas se han llevado a cabo acuerdos de este tipo entre los dos partidos con mayor representatividad y ha llegado el momento de que España deje de ser una excepción. Las únicas condiciones que debería exigir Feijóo a cambio de su apoyo a Sánchez son, que no haya comunistas en el Gobierno, que no se permita ningún referéndum de autodeterminación, que no haya amnistía de ningún tipo para los golpistas, que los etarras cumplan sus condenas y que la Justicia española se esfuerce por traer a Puigdemont para que sea juzgado y condenado sin ningún tipo de indulto para él. Feijóo demostraría así la condición de hombre de Estado que como presidente de Galicia aún no ha acreditado y quizá esto favorecería que, en unas próximas elecciones, sus resultados se aproximaran algo más a lo que le pronostiquen las encuestas.


Publicado el 15/08/2023 en Okdiario

La fiscalía de Sánchez auxilia a Puigdemont: «Pues ya está»


 

La Sala de Vacaciones del Tribunal Constitucional, formada por dos magistrados conservadores y una progresista, ha rechazado el recurso de amparo interpuesto por Carles Puigdemont contra la decisión del juez Pablo Llarena de solicitar su extradición para ser juzgado en España por desobediencia y malversación agravada, que son los delitos que se le imputan desde que Sánchez acordó con ERC derogar el delito de sedición a cambio de su apoyo. La extradición fue solicitada cuando el golpista prófugo perdió su inmunidad por decisión del Parlamento Europeo, ratificada por el Tribunal General de la Unión Europea. El motivo por el que se ha podido dar esta mayoría de magistrados de derechas en la Sala de Vacaciones ha sido porque el ex ministro socialista Juan Carlos Campo, pareja de la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, ha cambiado su turno de vacaciones pues quería veranear en la primera quincena de agosto.

La reacción de los separatistas de Junts no se hizo esperar. La presidenta del partido, Laura Borràs, condenada con una pena de prisión de cuatro años y medio y trece años de inhabilitación por prevaricación y estafa para favorecer a un amigo cuando era presidenta del Parlamento de Cataluña; publicó un tuit diciendo que: “El aparato judicial actuó en la campaña electoral y ahora actúa pensando en la investidura. No fallan. Resuelven en tiempo récord, en agosto… En España no hay separación de poderes; de hecho, algunos intentan que exista sincronización de poderes”. Lo de que en España no hay separación de poderes no hay quien se lo discuta, viendo como el sanchismo maneja las instituciones judiciales. Por su parte el secretario general de Junts, Jordi Turull, indultado por Sánchez de los delitos de malversación y sedición por los que había sido condenado a doce años de cárcel, ha dicho que: «Hace muchos años que el trabajo del TC es decorar jurídicamente una estrategia de Estado contra el independentismo. Y esta estrategia no cierra por vacaciones». Como si fuera extraño que cualquier Estado se defienda de los que, como ellos, lo pretenden destruir, que es lo que debería hacer España si no estuviéramos en manos de Sánchez.

Pero inmediatamente ha salido la Fiscalía del Tribunal Constitucional al rescate de los intereses del sanchismo. El presidente en funciones empieza así a pasar por el aro que manejan los de Junts, ya que sabe muy bien que no podrá ser investido si no se lo permite Puigdemont. Sólo habían pasado unas horas desde que el Tribunal Constitucional dio a conocer su decisión cuando, en plena tarde de agosto, con 41 grados a la sombra de Madrid, la Fiscalía del TC se reunió y anunció rápidamente que, en septiembre, recurrirá esta decisión presentando un recurso de súplica, basado en que, en su opinión, no existe una urgencia que obligue a la intervención de la Sala de Vacaciones y que sobre esta cuestión debe pronunciarse el Pleno del Constitucional, donde la izquierda cuenta con mayoría.

Casualidades del destino, tenemos ahora que recordar cuáles fueron las circunstancias en las que Sánchez pronunció aquella famosa frase presumiendo de que la fiscalía depende de él. El 6 de noviembre de 2019 Pedro Sánchez era entrevistado en Radio Nacional de España como presidente en funciones y candidato del PSOE en las elecciones generales que se tuvieron que repetir después de que en las de abril de ese mismo año ningún candidato lograse los apoyos suficientes para ser investido. Unos días antes, en el único debate televisado entre los cinco candidatos, el del PSOE le dijo al candidato del PP: «A ustedes, señor Casado, se les fugó Puigdemont. Y yo me comprometo hoy y aquí a traerlo de vuelta a España y que rinda cuentas ante la justicia española». Pues bien, en esa entrevista en RNE, el periodista le preguntó cómo pensaba cumplir su promesa de traer al fugado. Y fue entonces cuando, con la chulería que le caracteriza, Sánchez contestó: «¿De quién depende la Fiscalía? Del Gobierno. Pues ya está», dijo encogiéndose de hombros.

Como promesa electoral, para conseguir votos, Sánchez prometió que usaría a la Fiscalía para hacer que Puigdemont fuera juzgado. Cuatro años después, cuando necesita los votos de Puigdemont para ser investido, utiliza a esa misma Fiscalía para evitar que la justicia pueda actuar contra él. Esto es lo que han votado casi 8 millones de españoles. Nadie podrá decir que no tenemos lo que nos merecemos.


Publicado el 10/08/2023 en Okdiario

VOX 2.0 acaba de nacer

 


Puntual como un señor, Iván Espinosa de los Monteros comparecía a las 12:00 para anunciar los motivos personales y familiares por los que renuncia a su acta de diputado, así como a sus cargos en la dirección del partido; manteniendo su condición de afiliado a Vox y ofreciendo su colaboración a un Santiago Abascal para el que ha tenido palabras de agradecimiento y del que ha expresado su deseo de verlo, más pronto que tarde, en La Moncloa. Espinosa no ha sido el primero en abandonar Vox. Antes de las elecciones del 23J el partido anunciaba que no irían en las listas ni Rubén Manso ni Víctor Sánchez del Real, diputados por Málaga y Badajoz respectivamente, que representaban, junto a Espinosa de los Monteros, su ala más liberal.

Estas salidas apenas tienen nada que ver con los engaños y las mentiras con los que una desquiciada Macarena Olona se negaba hace apenas un año a cumplir su compromiso con los votantes andaluces, abandonando el partido con las peores maneras. La única relación entre ambos hechos está en la cada vez mayor fuerza que ha ido adquiriendo Jorge Buxadé como vicepresidente de Acción Política. Buxadé representa la facción más estatista, calificada por algunos como social-patriota. No en vano, en 1996 formaba parte de la candidatura de Falange Española Auténtica en Barcelona y en 2019 hizo unas declaraciones en las que afirmó que «me arrepiento de haber estado en el PP, no en Falange».

Vox 2.0 nace como un nuevo partido que aparta a los liberales y promociona a los estatistas haciendo bandera de un patriotismo en lucha contra los que pretenden desintegrar el actual concepto de la nación española para intentar crear una nueva; descrita por el etarra socio de Sánchez, Otegi, como «roja, republicana, laica y rota». Es importante esta lucha, pero por muy vital que resulte no parece muy acertado alejar del partido a todos los que, compartiéndola, representaban el enfrentamiento contra otra serie de problemas económicos y morales igual de importantes a los que se enfrenta un país en manos de la extrema izquierda más radical.

La decisión de Espinosa de los Monteros tampoco puede analizarse sin mencionar el comunicado emitido por Vox hace menos de 48 horas, anunciando su disposición a apoyar desde fuera la investidura de Feijóo, sin entrar en el Gobierno. Abascal anunciaba así que estaba dispuesto a dar su apoyo gratis al PP porque «España no puede estar en manos de sus enemigos». Se justificaba esta decisión con el argumento de que se quería evitar que Vox fuera «la excusa de nadie ni el impedimento para evitar un Gobierno de quienes pretenden destruir los fundamentos de la Constitución». Pero a muchos nos está costando reconocer al partido que torció el brazo de María Guardiola en Extremadura y al que prefiere que se repitan las elecciones en Murcia, antes de permitir que Fernando López Miras gobierne en solitario. Espinosa no lo ha mencionado expresamente, pero como tampoco ha expresado su apoyo a este comunicado, parece razonable pensar que se encuentra entre los que no acabamos de comprenderlo.

Nace hoy Vox 2.0 y sus enemigos y competidores electorales lo celebran porque creen que sigue el camino marcado por Ciudadanos y UPyD y que la democracia española sólo funciona con el bipartidismo. En un acto del PP, en 2008, Rajoy pronunció aquella histórica frase en la que dijo que «si alguien se quiere ir al partido liberal o al conservador, que se vaya» y fuimos muchos los que le hicimos caso, de manera que el partido de los 11 millones de votantes se convirtió en el de los 7 u 8 de ahora. Parece cierto que nadie aprende de errores ajenos, así que habrá que ver qué caminos sigue este nuevo partido que liderará Santiago Abascal cada vez rodeado de menos gente, menos brillante y menos diversa.


Publicado el 08/08/2023 en Okdiario

¡Qué raro todo entre Sánchez y Marruecos!


 

Cuando la sorpresa se convierte en rutina, deja de sorprender. La cosa ha llegado a tal punto que ha dejado de parecer raro que Pedro Sánchez aparezca de vacaciones con toda su familia en Marruecos, cuando había dicho que iba a ir a la Residencia Real de La Mareta, en Lanzarote, donde le esperaban con toda la seguridad preparada. Dicen desde su oficina de Moncloa que ha llegado a Marrakech directamente en un vuelo regular y que todos los gastos han sido «costeados íntegramente con recursos propios» del presidente. Que no haya viajado en Falcon y se lo haya pagado él es tan raro como que haya viajado en «un vuelo regular» y en las redes sociales no aparezca ninguna fotografía del presidente en funciones con su familia entrando, saliendo o volando en el avión, rodeado de personas que le gritan ¡qué te vote Txapote!, como le ocurre cada vez que pisa la calle.

En los cinco años que lleva Sánchez presidiendo el Gobierno ya ha viajado cinco veces a Marruecos, pero ésta es la primera vez que él, o cualquiera de los que le han precedido en La Moncloa, ha ido a pasar allí sus vacaciones estivales. ¡Qué raro! En estos días en que los empresarios del turismo están alertando de que los viajeros están cambiando Canarias por otros destinos más baratos, como Marruecos, Pedro Sánchez, ha decidido cambiar de forma inesperada Lanzarote por Marrakech como destino de parte de sus vacaciones veraniegas, que es una promoción con la que los marroquíes no podían ni soñar. Así que la prensa marroquí ha aprovechado el viaje para promocionar a Marrakech como principal destino turístico del país.

España era un país tan amigo de Argelia y del Polisario que hace apenas dos años, en abril de 2021, no dudamos en acoger a su líder, Brahim Ghali, para ser atendido por Covid en un hospital público de Logroño, pese a que aquí en España estaba imputado por delitos de violación, asesinato, lesiones, detención ilegal, terrorismo, torturas, desapariciones y lesa humanidad. Poco después supimos que, por aquellas fechas, entre mayo y junio de 2021, Pedro Sánchez fue espiado con el sistema Pegasus que permite acceder al contenido de los teléfonos móviles y del que sólo disponen los Estados. De este modo, algún Gobierno extranjero había obtenido casi 3 gigabytes del teléfono privado de Pedro Sánchez. Y es desde entonces que Sánchez empieza a hacer «cosas raras» con Marruecos.

Sin consultarlo con nadie, Sánchez envió el 14 de marzo de 2022 una carta a Mohamed VI que inmediatamente fue hecha pública por la Casa Real marroquí, en la que literalmente le dijo que «España considera que la propuesta marroquí de autonomía presentada en 2007 como la base más seria, creíble y realista para la resolución de este diferendo (sic)». Sánchez daba así un giro de 180 grados en la posición que, sobre el Sáhara Occidental, han mantenido todos los Gobiernos de España constantemente los últimos 46 años: la solución negociada y acordada entre Marruecos y el Frente Polisario. Sánchez nos enfrentó con Argelia, que era nuestro principal suministrador de gas y que inmediatamente declaró roto nuestro tratado de amistad y congeló el comercio con España y no obtuvo a cambio absolutamente nada de Marruecos. ¿No digáis que esto no os parece raro?

Según los datos del Ministerio de Interior, en lo que llevamos de 2023, han llegado a nuestras costas más inmigrantes alauitas en patera que en el mismo período del año anterior. Y Marruecos sigue sin aceptar la devolución de ningún inmigrante desde hace tres años. Las autoridades marroquíes no pierden ninguna ocasión de declarar que Ceuta y Melilla son «ciudades ocupadas» que esperan «recuperar», mientras seguimos regalándoles millones de euros para armamento estadounidense de última generación, adquirir vehículos policiales o sufragar «gastos de vigilancia» de su Ministerio del Interior. Sin obtener nada a cambio, Sánchez se lo entrega todo a Marruecos, hasta promocionando su turismo en competencia con el nuestro. Todo resulta inexplicable desde que el teléfono móvil de Pedro Sánchez fue espiado por un Gobierno extranjero.


Publicado el 03/08/2023 en Okdiario

PP y VOX solos contra todos


 

Pedro Sánchez ha perdido las elecciones, pero es el único candidato que puede juntar los apoyos necesarios para resultar investido, porque Alberto Núñez Feijóo, que las ha ganado, tan sólo podría contar con el respaldo de los 33 diputados de Vox, el de UPN y, quizá, el de Coalición Canaria. Hubo un tiempo en que los candidatos del Partido Popular a veces conseguían los votos de los partidos nacionalistas vascos y catalanes, como consiguió José María Aznar en 1996 con aquel famoso pacto cerrado en el Hotel Majestic del paseo de Gracia de Barcelona, en aquellos tiempos en los que el líder del PP decía que él hablaba catalán en la intimidad. Pero ya con Zapatero, el PSOE llegó a distintos acuerdos con los partidos nacionalistas e independentistas para, entre todos, tratar de impedir que la derecha pueda volver a gobernar España, como por ejemplo acordaron en el Pacto del Tinell de finales de 2003.

Sánchez puede ser investido con el apoyo de los 20 partidos políticos de extrema izquierda, estatales y autonómicos, integrados en la coalición Sumar, si además consigue que se incorporen a esta coalición otros cinco partidos independentistas, golpistas y proetarras más, como son ERCJuntsBilduPNV y BNG. Juntándolos todos, el PSOE podría llegar a tener 178 escaños favorables a hacer presidente del Gobierno a Pedro Sánchez, superando sólo así los 172 que, como máximo, podría aglutinar Feijóo. Sánchez no está en condiciones de poner ninguna pega a los votos de los prófugos, malversadores, golpistas y terroristas condenados, que necesita para alcanzar la mayoría, sumándolos a los de la extrema izquierda liderada por Yolanda Díaz, que lleva en su programa propuestas como una mesa de negociación bilateral entre la Generalitat y el Gobierno del Estado, cuyos acuerdos sean sometidos a una consulta a los ciudadanos de Cataluña a la que no denomina referéndum de autodeterminación, pero que, evidentemente lo es. Y tenemos claro que, para ser investido, Sánchez es capaz de entregarles lo que exijan.

el PP sólo puede contar con Vox. Esto no es ninguna novedad, es algo que todos deberíamos haber tenido clarísimo desde antes de que se convocaran las elecciones del pasado 23 de julio, pero, sorprendentemente, parece que los de Feijóo aún a día de hoy se resisten a asumirlo. Absurdamente, todavía le siguen suplicando al PSOE que les permita gobernar porque han sido los más votados, mientras los de Sánchez se ríen de ellos en su cara, humillándoles una y otra vez. El PNV, que traicionó a Mariano Rajoy en la moción de censura de 2018, dos días después de aprobarle los Presupuestos Generales del Estado, no va a separarse nunca más de lo que voten el resto de partidos vascos y catalanes que, desde el golpe de Estado de 2017, estarán siempre enfrente del PP. Los dos bloques están clarísimos.

No se puede volver a cometer este mismo error. El escaño que el PP le quita a Vox o viceversa, no suma nada ni ayudará a que su candidato sea investido. Pero los votos que uno le resta al otro siempre podrán ser aprovechados por un tercer candidato que se vea beneficiado de rebote y la absurda teoría del voto útil se ha traducido en esta ocasión en la pérdida de nueve escaños que han ido a caer en manos, seis del PSOE, dos de Junts y uno de Sumar, en las provincias en las que el enfrentamiento entre los dos partidos de centro y derecha ha resultado más absurdo. Esos nueve escaños son los que van a permitir que Sánchez mantenga el poder. Si el centroderecha quiere gobernar, tiene que asumir que el bipartidismo ya no existe y aceptar que ha sido sustituido por dos bloques claramente enfrentados, concienciarse de a cuál de ellos pertenece y, en consecuencia, con quién puede contar y a quién va a tener siempre en contra. El PP tiene hueco para crecer entre los votantes de centroizquierda no nacionalistas, como en su día hizo Ciudadanos, y Vox puede quedarse sólo en el centroderecha. Sólo así pueden derogar el sanchismo, que es el objetivo de la mayoría de votantes españoles que, pese a que somos más, vamos a tener que esperar a una nueva ocasión en la que los partidos a los que votamos corrijan los errores cometidos esta vez.


Publicado el 01/08/2023 en Okdiario