El leñazo del partido de Pablo Iglesias


Lo que le ha pasado al partido de Pablo Iglesias no se puede describir de otra forma que como un leñazo descomunal, una debacle histórica o un varapalo colosal. Por eso anda desaparecido y ha pasado de publicar 20 tuits diarios, a sólo 4 en dos días. Porque no hay excusa ni justificación que valga, ni tampoco queda ninguna duda de que el único responsable de tan nefastos resultados electorales es él. Ni siquiera le queda nadie a quien echarle la culpa, porque ya se los ha cargado a todos. Podemos y lo que le cuelga -‘mareas’, ‘comunes’ y ‘ahoras’- han obtenido unos resultados similares a los que Izquierda Unida venía obteniendo antes de la irrupción del marqués de Galapagar o incluso bastante peores en determinados ámbitos. Todo por su soberbia y su enorme ego, que le han hecho creerse por encima del bien y del mal.
En las elecciones generales ha perdido a 1 de cada 3 votantes, bajando de más de 6 millones de votos en 2015 a menos de 4 en 2019 y perdiendo casi la mitad de sus diputados. Y en las europeas le ha ido aún peor, bajando 1,5 millones de votos respecto a las elecciones generales celebradas un mes antes y pasando de los 11 eurodiputados que lograron por separado Izquierda Unida y Podemos en 2014, a los 6 que han conseguido en coalición. Y en las autonómicas le ha ocurrido lo mismo. En Andalucía Teresa Rodríguez perdió el 32% de los votos logrados en 2015. Y en el conjunto de comunidades han bajado de los 106 diputados que tenían, a sólo 37. En Castilla La Mancha, donde ostentaban la vicepresidencia segunda de un Gobierno de coalición con el PSOE, han perdido 9 de los 10 diputados que consiguieron. Y en Madrid Errejón triplica en escaños a Isa Serra, la podepija que no quería los donativos de Inditex.
Pero posiblemente donde mejor se visualice el leñazo de los de Pablo Iglesias sea en las elecciones municipales, donde pueden haber perdido 6 de las 7 alcaldías que ostentaban, manteniendo sólo la de Cádiz, con un ‘Kichi’ que en numerosas ocasiones se ha manifestado muy crítico con las actuaciones del líder de su partido. Un Pablo Iglesias que en Madrid apoyó a Carlos Sánchez Mato, que le ha restado 40.000 votos a Manuela Carmena sin conseguir representación en el ayuntamiento, provocando que ésta, junto al PSOE, se quede a dos concejales de una mayoría que sí suman PP, Cs y VOX; igual que en Zaragoza. En Barcelona Ada Colau ha reconocido su derrota felicitando a Maragall (ERC), que ha quedado por delante de ella. Las Mareas también han perdido las alcaldías de La Coruña, Ferrol y Santiago.
Y el responsable de esta debacle no es otro que un ensoberbecido Pablo Iglesias que lleva cinco años apartando de su lado a cualquiera que pretenda hacerle sombra. Presumiendo del machismo que le hacía desear azotar hasta que sangrase a Mariló Montero, relegando a su exnovia al gallinero del Congreso para sentar a su lado a su nueva pareja, la que luego sería la madre de sus hijos y con la que se trasladaría a vivir a un casoplón de Galapagar, después de haber presumido de vivir en un pisito de Vallecas y haber criticado a los políticos que vivían en chalets, alejados de ‘la gente’. Pensó que podía colocar a su padre, condenado por pertenecer a los terroristas del FRAP, que se le permitiría llevar en sus filas a condenadas por asesinato y a una banda organizada de ‘secuestraniños’. Y pensó que se consentirían sus insultos a una de las personas más respetadas y admiradas en España, como es don Amancio Ortega. Su enorme ego le cegó, porque en realidad Pablo Iglesias no es el mesías que cree ser, sino un simple líder estudiantil mal encarado, mal peinado, mal vestido y con grandes carencias odontológicas y morales.
Publicado el 30/05/2019 en Okdiario

Amancio Ortega no es ni pijo ni podemita


Isabel Serra es podemita, concretamente de la sección anticapitalista, subsección pablista, sector pijo. No como su hermana mayor, Clara, que es tan podepija como ella, pero se ha apuntado al sector errejonista. La sección pija de Podemos es una de las más numerosas y está integrada por niñatos de la alta sociedad que han disfrutado de todos los privilegios, recibiendo la educación más elitista en España y en el extranjero y de la universidad pasaron directamente a ocupar escaños sin apenas haber cotizado, pero haciéndose pasar por representantes de una “clase” trabajadora por encima de la que han estado toda su vida. Las Serra, BescansaPitita (Rita) MaestreEspinarIglesiasErrejón, etc. conforman el sector pijo de Podemos, el que manda.
Como Podemos obliga a todos sus cargos públicos a donar parte de su sueldo, la podepija dona cada mes 560,92 € a Podemos y otros tantos al proyecto social IMPULSA, según indica su portal de trasparencia. IMPULSA es un programa que destina las donaciones de sus cargos públicos a proyectos sociales. Y ese donativo a la pija podemita le parece bien. Lo que no le gusta es que lo haga Amancio Ortega, que es rico como Soros y Roures, pero no es progre como ellos. El leonés es un trabajador hijo de trabajadores de verdad, pura “clase” obrera que con mucho esfuerzo e inteligencia ha dado ejemplo de que todas las teorías comunistas de Isa Serra son mentira.
Inditex pagó 6.166 millones € en impuestos en 2018, 1.700 de ellos en España, genera 175.000 puestos de trabajo, 50.000 de ellos en España y el resto en los países en desarrollo que más lo necesitan, el 75% de sus empleados son mujeres que cobran de media un 0,8% más que los hombres. Amancio Ortega pagó los miles de millones en impuestos que le corresponden, generó cientos de miles de puestos de trabajo y hace sus donaciones de forma honesta, legal y sincera, a diferencia de los podemitas. Por ejemplo, Monedero en cuanto trincó los 425.000 € de Chávez, montó una empresa fantasma con la que intentó engañar a Hacienda y no pagó lo que le correspondía hasta que Montoro le avisó de que lo habían pillado. Echenique le pagaba a su empleado en negro defraudando a la Seguridad Social. Y Pablo Iglesias declaraba 41.045,48 € de gastos como autónomo, que son más del 80% de los 49.299,26 € de ingresos que le facturaba a la televisión iraní, con lo que la declaración de la renta le salió 3.500 € a devolver.
De recibir donativos también saben mucho los podemitas, pero los que ellos recibieron de las tiranías chavistas y de la teocracia iraní no estaban dedicados a curar a los enfermos de cáncer, como los de Ortega, sino que eran para “crear fuerzas políticas y movimientos sociales, propiciando en España cambios políticos aún más afines al gobierno venezolano“, como consta en el documento que Hugo Chávez firmó de su puño y letra para que se transfirieran más de 7 millones € a la fundación CEPS, que fue el origen de Podemos. Así que cuando los podepijos dicen que no se aceptan los 310 millones € de Ortega para luchar contra el cáncer a los que Iglesias llama “limosna”, los españoles pensamos que ojalá ellos no hubieran aceptado donativos de dictadores, que ojalá ellos hubieran pagado los impuestos con la honradez que lo hace Ortega, que ojalá ellos se preocuparan de crear el empleo y de ayudar como lo hace él. Y que lo que Amancio Ortega merece es el reconocimiento y la gratitud de todos nosotros.
Publicado el 21/05/2019 en Okdiario

Perdón, pero a mí Rubalcaba no me gustaba


Si Alfredo Pérez Rubalcaba siguiera vivo, todos lo recordaríamos como el protagonista de uno de los más vergonzosos episodios de la democracia española. En la noche del 13 de marzo de 2004, en plena jornada de reflexión de las elecciones generales que se celebraron al día siguiente, el diputado socialista compareció ante los medios de comunicación y pronunció la frase por la que le juzgará la historia: "Los ciudadanos españoles se merecen un gobierno que no les mienta". Apenas habían pasado 48 horas del terrible atentado en el que perdieron la vida 193 personas en varios trenes de Cercanías de Madrid y con sus cuerpos aún calientes, Rubalcaba utilizaba su sangre delante de las cámaras de televisión para llenar las urnas de miedo, odio y venganza. En la España que soñamos, los políticos de todos los partidos se habrían unido haciendo frente común contra unos terroristas que pretendían influir en el resultado electoral. En la España que tenemos, el socialista Rubalcaba utilizó las bombas para entregar el Gobierno al PSOE de José Luis Rodríguez Zapatero.
Si Rubalcaba no hubiera muerto a nadie se le habría olvidado que, como pago a su vergonzosa actuación de aquella noche, Zapatero lo nombró portavoz del Grupo Socialista en el Congreso de los Diputados hasta que en abril de 2006 lo ascendió a Ministro del Interior. Cargo que ocupaba cuando se produjo el "chivatazo" del bar Faisán. Joseba Elosua, dueño de dicho bar desde el que presuntamente se dirigía una red de extorsión de ETA, fue advertido por el inspector de policía José María Ballesteros y el jefe superior de policía del País Vasco Enrique Pamies, de que se iba a producir una redada. Se publicaron actas incautadas a ETA en las que los terroristas afirman que el Gobierno de Zapatero y Rubalcaba les informó de que aquel chivatazo había sido una decisión política con la que se intentó evitar las detenciones.
Si Rubalcaba siguiera entre nosotros habría que echarle en cara que él fue el Secretario de Estado de Educación que pergeñó la LOGSE de tan nefastas consecuencias. No podríamos olvidarnos de que ocupó la Portavocía del Gobierno en la etapa en la que el PSOE de Felipe González se hundió, aplastado por la contundencia de los escándalos de los GAL, de los papeles del Cesid, de la corrupción de Filesa, o de la fuga de Roldán. Rubalcaba se oponía a todas las evidencias mintiendo impunemente en cada rueda de prensa, en las que lo mismo negaba la existencia de los GAL, que anunciaba la falsa detención del ex director general de la Guardia Civil, en Laos. El comando Rubalcaba era un equipo de periodistas encargados de intoxicar, censurar, teledirigir y crear atmósferas político-informativas que paliasen los delitos y escándalos de la época felipista, según lo describió Julio Anguita.
Pero lamentablemente Rubalcaba ya no está entre nosotros y como él mismo dijo hace unos años: "Los españoles enterramos muy bien". Así que con toda una biografía plagada de fechorías, el socialista ha sido incinerado como un gran hombre de Estado y hasta honrado por un Pedro Sánchez que le había retirado la palabra por haberse posicionado en contra de sus pactos con golpistas y chavistas. Tanto la prensa de izquierdas como la de derechas, al rebufo de los líderes de todos los partidos excepto VOX, han echado toneladas de flores sobre su ataúd. “Un rival admirable”, es la forma como Mariano Rajoy se despide de un personaje por quien decía sentir una “admiración sincera”. Y yo me acuerdo de que "los ciudadanos españoles se merecen un gobierno que no les mienta" y me despido de él con una frase de Voltaire: “A los vivos les debemos respeto pero a los muertos solo les debemos la verdad”.
Publicado el 14/05/2019 en Okdiario

Los embustes del candidato Puigdemont


«Perquè torni el president, s’ha de votar el president» -para que vuelva el presidente se debe votar al presidente-. Éste fue el eslogan del vídeo con el que Junts per Catalunya engañó a los catalanes hace poco más de un año, prometiéndoles que el fugado de la justicia Carles Puigdemont volvería a España para ser investido de nuevo presidente de la Generalidad de Cataluña, en el caso de ser el más votado en las elecciones autonómicas que se celebraron el 21 de diciembre de 2017. En el vídeo se veía al prófugo paseando por un bosque belga mientras una voz en off recordaba a los golpistas encarcelados y a los que, como él, habían huido de la justicia, tanto de su partido como de ERC, contra quienes competían electoralmente. El engaño funcionó y con esta mentira Puigdemont consiguió dar más pena que el encarcelado Oriol Junqueras.
Que no iba a volver lo sabíamos todos, excepto los 948.233 pardillos que decidieron tragarse la bola y votarlo para nada. Su escaño sigue tan vacío como los de sus compañeros de candidatura encerrados en prisión preventiva, Jordi SànchezJosep Rull y Jordi Turull quienes, como Puigdemont, decidieron además no nombrar un diputado que los sustituya -como sí hicieron los políticos de ERC Junqueras y Romeva– dejando al Parlamento de Cataluña sin capacidad para aprobar nada. Y lo mismo que sabíamos entonces que Puigdemont estaba mintiendo también lo sabemos ahora cuando de nuevo promete que regresará a España si resulta elegido Eurodiputado gracias a que la inmunidad e inviolabilidad parlamentaria le permitiría moverse por todos los Estados miembros de la UE desde el mismo momento en que se proclamase su elección, incluso antes de recoger el acta, motivo por el que no podría ser detenido, dice.
Pero es otra mentira, por todos es sabido que la inmunidad en la Eurocámara  es de aplicación exclusivamente “por actividades cometidas durante su mandato como eurodiputado.” En concreto, la inmunidad en Europa se refiere a que “los diputados al Parlamento Europeo no pueden ser investigados, detenidos ni procesados por las opiniones expresadas o los votos por ellos emitidos en calidad de diputados al Parlamento Europeo”. Exclusivamente en ese caso no podrían ser detenidos ni procesados en su territorio nacional. Sin embargo, se añade: “La inmunidad no puede invocarse en caso de que un diputado haya cometido un delito o las autoridades judiciales competentes alberguen sospechas al respecto”. Por este motivo los servicios jurídicos de la Eurocámara ya han confirmado que Puigdemont podría ser detenido en cuanto cruzase la frontera para cumplir con el requisito de acudir a Madrid para jurar o prometer el cargo y ser incluido en la lista de eurodiputados que las autoridades españolas comunicarán al Parlamento Europeo.
Puigdemont no volverá a España, luego no será eurodiputado. No le importa en absoluto que los intereses de sus votantes queden sin voz en el Parlamento Europeo, sólo quiere dar titulares a la prensa internacional y burlarse de las instituciones españolas. Nuestra legislación es clara, mientras siga fugado en rebeldía no podrá ostentar ningún cargo público, pero la fiscalía, en dependencia jerárquica de Pedro Sánchez, se ha posicionado a favor de que se le permita ser candidato, lo que ha condicionado una muy discutible decisión de los tribunales de justicia. Igual que Rajoy le dejó fugarse y acató sin rubor las afrentas de los juzgados belgas y alemanes, Sánchez permite ahora que un golpista prófugo se presente como candidato para representar a España en el Parlamento Europeo y así seguir haciendo propaganda contra nosotros en las instituciones europeas, subvencionando su campaña electoral con nuestros impuestos, a cambio de sus votos en el Congreso de los Diputados.
Publicado el 07/05/2019 en Okdiario