Con Bildu, ¿por qué no vamos a pactar?


 

«Con Bildu no vamos a pactar, si quiere se lo digo cinco veces, o 20. Con Bildu no vamos a pactar. Con Bildu, se lo repito, no vamos a pactar», prometió Pedro Sánchez en la campaña electoral de 2015. Como luego necesitó los votos de Bildu para la moción de censura contra Rajoy, y los ha vuelto a necesitar en sus dos investiduras, que no habría sacado adelante sin el apoyo de Bildu, Pedro Sánchez explicó sus palabras diciendo que él «no ha gobernado con Bildu» puesto que «no hay ni consejeros ni ministros de Bildu en el Gobierno», volviendo a mentir sobre su primera mentira, ya que lo que él prometió «20 veces» fue que con Bildu no iba a pactar, no que no pensaba gobernar con ellos.

Pedro Sánchez sometió ya muchas de sus mentiras al escrutinio de las urnas el pasado 23 de julio y los votantes socialistas decidieron otorgarle al PSOE un diputado más de los que había conseguido en 2019, blanqueando todas sus mentiras no sólo sobre sus pactos con Bildu, sino también sobre los indultos que prometió que no iba a conceder, sobre el Sáhara, subidas de impuestos, y hasta su tesis doctoral fake, que en vez de mentiras dijeron que eran cambios de opinión. Pero los pactos con Bildu, que eran evidentes puesto que había recibido sus votos y los proetarras no se los iban a regalar, permanecían enmascarados, dejando a la vista sólo el traslado a cárceles del País Vasco de todos los presos etarras. Todos sabíamos que había algo más, pero Sánchez, mintiendo, presumía de que no era así porque, a la vista estaba que habían permitido que el ayuntamiento de Pamplona quedara en manos de UPN, cuando sumando sus votos a los de Bildu, se lo podían haber arrebatado.

Hasta tal punto llegó la intención de engañar de Pedro Sánchez que, tras las elecciones del 28 de mayo de 2023, el Parlamento de Navarra retrasó su sesión de investidura hasta el 14 de agosto, cuando ya se habían celebrado las elecciones generales de julio. Así el Partido Socialista hizo presidenta de Navarra a María Chivite por un único voto de diferencia, con los 21 escaños que sumaban con Geroa Bai y Podemos, teniendo en contra los 20 de UPN, PP y VOX; gracias a que los nueve diputados de Bildu se abstuvieron para permitirlo. Este pacto con Bildu, que estaba cerrado desde el día siguiente de las elecciones, se podía ocultar hasta agosto porque el Estatuto navarro así lo permite. Pero la normativa que rige en los ayuntamientos es diferente y en Pamplona el alcalde debía ser elegido antes del 17 de junio.

Por eso, con intención de engañar a sus votantes, Sánchez presumió de haber permitido que la alcaldesa de Pamplona fuera Cristina Ibarrola, de UPN, y hasta se permitió decir que eso demostraba que no había pactado con Bildu, como prometió, a pesar de todos los presos acercados al País Vasco, de sus votos en la investidura y hasta de lo del Gobierno de Navarra.

Y hoy en Pamplona, Sánchez vuelve a demostrar que es un sinvergüenza mentiroso que engaña a sus votantes, al resto de españoles y a la comunidad internacional, una vez tras otra sin el menor rubor. Hoy Pedro Sánchez ha entregado el ayuntamiento de Pamplona a los asesinos de los socialistas Fernando Múgica, Fernando Buesa, Ernest Lluch y hasta un total de 11 militantes socialistas que se encuentran entre las casi 1.000 víctimas mortales de la banda asesina, incluido Tomás Caballero, concejal pamplonés de UPN asesinado por ETA en 1998. Pero la falta de vergüenza de Pedro Sánchez es consecuencia directa y responsabilidad de la indecencia de los votantes socialistas. Sus votantes se han echado a la espalda todas las desvergüenzas del presidente de Gobierno más mentiroso de la historia de España y del mundo. Seguir votando a Sánchez sabiendo que te va a engañar demuestra que tienes la misma decencia que Chapote, que Otegui, o que Joseba Asirón, el bilduetarra que ha recibido el bastón de mando como alcalde de Pamplona, gracias a los indecentes votantes del Partido Socialista.


Publicado el 28/12/2023 en Okdiario

La agresora Rita Maestre debe dimitir


 

Pese a que mi artículo se encuentra dentro de la sección de opinión, tengo que empezar hoy haciendo un relato de unos hechos que no son opinables, porque están recogidos en un vídeo en el que, desde diferentes ángulos, se observa perfectamente lo que ocurrió el viernes pasado en el Pleno del Ayuntamiento de Madrid. Nadie puede negar que lo que se ve en esas imágenes es al portavoz de VoxJavier Ortega Smith, bajando del estrado después de terminar su discurso y que, al pasar por delante del escaño ocupado en primera fila por el concejal de Más Madrid, Eduardo Fernández Rubiño, escucha algo que éste le dice, se acerca a él, le encara y, en un gesto claramente airado, golpea con los papeles que lleva en la mano los objetos que se encuentran sobre la mesa, entre ellos una botella pequeña de plástico vacía que sale despedida de la mesa sin impactar contra el concejal.

Sentada junto a Eduardo Fernández Rubiño estaba la portavoz del grupo municipal Más Madrid, Rita Maestre, pero en el momento en que Ortega Smith baja del estrado ella se levanta y comienza a recoger sus cosas dando la espalda al de Vox y a su compañero, por lo que es evidente que no ve nada de lo ocurrido hasta que se gira al escuchar las voces que comienzan tras el vuelo de la botella vacía. Sin saber lo que ha pasado Rita agrede físicamente al concejal de Vox golpeándole en el hombro para apartarlo del escaño y comienza una actuación de teatro que será candidata a los premios Max en la categoría de ópera bufa, por el cante que da.

Recordemos que Rita no ha visto lo que ha sucedido. Ni siquiera ha hablado con su compañero para que le cuente su versión, pero inmediatamente después de agredir físicamente a Ortega Smith comienza a hacer aspavientos con la boca abierta por el asombro, como si hubiera visto a un hijo golpeando en la cara a su padre octogenario con un calcetín sudado. Con el brazo extendido apunta con el dedo, acusadora, al de Vox. Se abraza a su compañero en actitud defensiva y consoladora y del abrazo pasa a apartarlo hacia atrás en un gesto que se puede interpretar como defensivo, para intentar alejarlo de un violento agresor que quizá vuelva a rematar en el suelo a la indefensa botella de plástico vacía; o quizá pueda ser como diciéndole a su compañero, apártate que no sabes y de esto ya me encargo yo.

La actuación de la portavoz de Más Madrid continúa cuando coge el micro y toma la palabra. Aunque todos hemos visto que Ortega Smith no ha tocado a su compañero sino que, en un gesto de rabia por las palabras que ha escuchado y de las que todavía no hemos hablado, lo único que ha hecho es golpear con unos folios sobre la mesa, provocando que una botella vacía cayera al suelo sin tocar a nadie; a pesar de que Rita no lo ha visto porque estaba de espaldas y ni siquiera se ha preocupado por preguntar a alguien que se lo explique, la portavoz de Más Madrid se inventa que «se acaba de producir una agresión física» y en un tono y con una actitud dignos de la más estricta gobernanta inglesa, le ordena a Ortega Smith que, inmediatamente se levante y le pida perdón a su compañero.

Sin empezar aún con mi obligación de dar una opinión sobre lo ocurrido, continúo describiendo unos hechos que, insisto, están grabados por las cámaras del Pleno y son, por tanto, indiscutibles. Ortega Smith pidió perdón como le había ordenado la dominatriz roja así que ésta, sorprendida, látigo en mano, tuvo que elevar su nivel de dominación exigiendo ya la dimisión del concejal de Vox. Finalmente a la charlotada se unió el alcalde de Madrid, José Luís Martínez Almeida, a quien las cámaras no enfocan cuando ocurrió el incidente, por lo que no sabemos si pudo ver en directo lo que ocurrió o simplemente decidió creerse la farsa montada por la oposición de extrema izquierda. Almeida aceptó el papel secundario de Torquemada y condenó a Ortega Smith a la hoguera, calificando su actuación como una «agresión absolutamente inaceptable», exigiéndole que entregue el acta y dimita como concejal.

Otro hecho indiscutible son las múltiples agresiones físicas que han sufrido distintos miembros de Vox por parte de delincuentes de extrema izquierda, como Rita Maestre, que recordemos fue condenada por su participación en el violento asalto a la capilla de la Complutense. A los de Vox los han apedreado, los han golpeado, han destrozado sus carpas, han vandalizado sus carteles y sus sedes en numerosísimas ocasiones, con el silencio cómplice de Rita Maestre y todos sus compañeros.

La única agresión física absolutamente inaceptable se produce cuando la dominatriz roja, Rita Maestre, golpea en el hombro a Ortega Smith con tanta fuerza como para apartarlo de su bancada. Agresiones verbales existen varias, la primera proviene del concejal de Más Madrid, Eduardo Fernández Rubiño, quien ha dado dos versiones acerca de lo que dijo, que se pueden resumir en que Ortega Smith le da asco o que le parece asqueroso. Lo dijo en el momento y más tarde se reafirmó y confirmó que lo mantiene. La segunda agresión verbal la protagoniza Rita Maestre fingiendo que ha ocurrido algo que todos vemos que se ha inventado y acusando falsamente de una agresión física ficticia. Y finalmente el alcalde de Madrid agrede también al representante del único partido con el que el PP puede alcanzar acuerdos que le permitan gobernar y ojalá más pronto que tarde, derogar el sanchismo.

Hasta aquí los hechos que nadie podrá negar, porque se ven claramente en todas las grabaciones. Mi valoración de los mismos es breve, Rita Maestre debe dimitir por agredir físicamente a Javier Ortega Smith y por mentir, y el alcalde Almeida debe reflexionar para no volver a confundir a sus únicos aliados con sus muchos enemigos.


Publicado el 26/12/2023 en Okdiario

Sánchez niega el referéndum, luego lo hará


 

En una entrevista concedida a la emisora catalana del conde de Godó y grande de España, RAC1, unas horas antes de reunirse con Pere Aragonés en la Generalidad de Cataluña, Pedro Sánchez ha dicho que el referéndum «desde el punto de vista material, en la Constitución no cabe y, en segundo lugar, no resuelve el problema político», descartando así de forma clara y contundente la posibilidad de que Cataluña pueda celebrar un referéndum de autodeterminación, ni siquiera con carácter no vinculante. O sea, que se confirma que habrá referéndum.

La última vez que el presidente del Gobierno se reunió con Pere Aragonés en el Palacio de la Generalidad fue el 15 de septiembre de 2021, tres meses después de haber indultado a los golpistas. Tras finalizar esa reunión, Sánchez compareció ante los medios de comunicación y dijo que «es evidente que para el independentismo, el referéndum y la amnistía, es su propuesta; y para nosotros, evidentemente, ni el referéndum ni la amnistía son posibles». Dos días antes de las elecciones de julio, entrevistado en Televisión Española, Sánchez se comprometió a que no aceptaría la propuesta de ERC y Junts de aprobar una amnistía a cambio de sus votos en la investidura, porque «no entra en la Constitución española». Igual que «cambió de opinión» respecto a la amnistía, que entonces le parecía inconstitucional, lo hará en relación con el referéndum.

Que Sánchez no tiene palabra ni vergüenza para hacer lo contrario de lo que promete con tal de seguir gobernando, es algo indiscutible. Como tampoco se puede dudar de que los independentistas sí cumplen y hacen todo aquello a lo que se comprometen. En el acuerdo que firmaron el PSOE y Junts para la investidura de Pedro Sánchez se dice literalmente que «Junts propondrá la celebración de un referéndum de autodeterminación sobre el futuro político de Catalunya amparado en el artículo 92 de la Constitución». Y debajo de ese acuerdo aparece la firma de Santos Cerdán como Secretario de Organización del Partido Socialista Obrero Español.

En numerosas ocasiones, Puigdemont ha repetido que pedirá ese referéndum desde la primera reunión con el PSOE ante los verificadores internacionales. El golpista huido de la justicia insiste en que llevan seis años defendiendo «con firmeza el referéndum de independencia» a pesar de que hay quien querría que lo olvidaran y que pasaran página. Por su parte, Oriol Junqueras, portavoz de Esquerra Republicana, entrevistado el martes en Telecinco ha dicho que «no queremos ni podemos renunciar al ejercicio democrático como el derecho al voto, encontraremos los mejores caminos para poder a votar… pedir un referéndum no es un delito».

El pasado 16 de noviembre, Pedro Sánchez fue investido por 8 votos de diferencia, 179 a favor frente a 171 en contra. Sólo conque cinco de esos diputados cambien de opinión prosperaría una moción de censura. Y lo mismo le pasa al Gobierno con cualquier normativa importante que pretenda sacar adelante. Sánchez está en manos de cualquier grupo de más de cinco diputados de los que le apoyaron en la investidura. Recordemos que tanto ERC como Junts tienen siete diputados, Bildu cuenta con seis y tanto el PNV como Podemos tienen cinco. Cualquiera de todos estos partidos políticos pueden hacer caer a Pedro Sánchez cuando quiera.

Para investir al presidente del Gobierno, lo que más prisa le corría a los independentistas era la amnistía. Pese al indulto, sin amnistía, la inhabilitación de Oriol Junqueras continuaría vigente hasta 2031. Teniendo en cuenta que las próximas elecciones catalanas tienen que celebrarse, como muy tarde, antes de comienzos de 2025, tanto el líder de ERC como Puigdemont necesitaban que los plazos para la entrada en vigor de la amnistía empezaran a correr con urgencia. Por eso se centraron en obligar a Sánchez a amnistiarlos antes de exigir el referéndum de autodeterminación. Pero una vez conseguido ese objetivo nadie puede tener ninguna duda de que no permitirán que Sánchez gobierne sin cumplir con el referéndum que ya les ha prometido. Sabemos que habrá referéndum porque los independentistas lo exigen y el presidente depende de ellos, pero sobre todo estamos seguros de que lo habrá porque Sánchez acaba de decir que no cabe en la Constitución.


Publicado el 21/12/2023 en Okdiario

Que Sánchez se haga la foto con Txapote


 

Con la chulería y los malos modos que le caracterizan, en un corrillo informal con periodistas al terminar los actos institucionales del 45 aniversario de la Constitución, el miércoles 6 de diciembre Pedro Sánchez dijo a la prensa que pensaba llamar a Feijóo para proponerle celebrar una reunión en Moncloa antes de que finalice el año. No lo hizo, Sánchez no llamó a Feijóo sino que, cinco días más tarde, el lunes día 11 por la tarde, el gabinete del jefe del Ejecutivo contactó con el del líder del Partido Popular para proponerle por teléfono las fechas y los temas que, unas horas más tarde y sin esperar respuesta ni negociación ninguna, Sánchez contaría a las cámaras de Telecinco, en la entrevista que le hizo Pedro Piqueras.

El presidente del Gobierno pretendía recibir en Moncloa al líder de la oposición ayer lunes 18, el próximo viernes 22, o el siguiente, el 29 de diciembre. «He ofrecido tres grandes pactos de Estado», contó a las cámaras de televisión. «El primero, para la reforma del artículo 49 -de la Constitución- y quitar el término «disminuido». El segundo, para la reforma del sistema de financiación autonómica… Y, finalmente, reformar y renovar el Consejo General del Poder Judicial». Sánchez quiere que se constituya una comisión de trabajo para la que él ya ha designado a María Jesús Montero, Patxi López y Félix Bolaños. Y amenaza con que, si no hubiera acuerdo sobre la renovación del CGPJ, podría implantar la propuesta realizada en un artículo de prensa por el presidente interino del CGPJ, Vicente Guilarte, en el que dice que debería retirársele su principal competencia al órgano que él preside, que son los nombramientos de la cúpula judicial.

Guilarte es un catedrático de Derecho Civil que fue nombrado hace 10 años vocal del CGPJ a propuesta del PP, órgano que preside suplentemente desde julio. Y como tanto suele ocurrir con los supuestos independientes elegidos por el Partido Popular, tiene la curiosa costumbre de ausentarse de las votaciones, abstenerse o incluso votar a favor de las propuestas que benefician al PSOE. En 2015, siendo ya vocal del CGPJ, fichó como consultor externo del bufete de abogados Maio Legal, donde la socialista Elena Salgado -ex ministra de Economía durante el último Gobierno de Zapatero- figura como asesor senior.

En el artículo al que hizo referencia Pedro Sánchez, publicado por Vicente Guilarte en El País, se refiere en varias ocasiones como un problema «electoralista» al conflicto que mantiene bloqueada la renovación del CGPJ porque el PSOE pretende designar a dedo a unos nuevos vocales que respondan como marionetas a lo que Sánchez les ordene, mientras que el PP propone modificar antes la Ley Orgánica del Poder Judicial, para que los miembros del CGPJ sean elegidos de forma corporativa por los propios jueces, como obliga la Constitución. Para el presidente del CGPJ, elegido por el PP, dotar de independencia al órgano que él preside es simplemente un interés electoral del partido que a él le nombró. Y como solución «genial» propone dejar sin funciones al Consejo que está en funciones. ¡Brillante! Con estos bueyes tenemos que arar.

Ante la chulería y las amenazas de Sánchez, Feijóo da un pasito adelante y otro para atrás. El Partido Popular anunció que «por sentido institucional y democrático», acepta el encuentro desde el primer momento, pero puso una serie de condiciones, como que el orden del día les sea remitido antes por escrito y se añadan otros asuntos a tratar; con lo que van dando largas. Mientras el PSOE avanza con la Ley de Amnistía, los «pactos encapuchados» con Bildu, las comisiones en el Congreso para investigar el lawfare y la reunión entre Sánchez y Puigdemont en el extranjero siguen su curso mientras el PP aleja la foto que Sánchez quiere hacerse junto a Feijóo.

Si tenemos claro que Pedro Sánchez, junto a sus socios comunistas, proetarras y golpistas, está dando un golpe contra nuestra democracia, poniendo fin a la separación de poderes, impidiendo la alternancia, y atacando la unidad de España, ¿cómo va a acudir Feijóo a hacerse una fotografía dándole la mano al golpista? A Sánchez sólo hay que contestarle usando sus mismas palabras: no es no. ¿Qué parte del no, no ha entendido? La foto que Sánchez se la haga con Txapote, Josu Ternera, Junqueras y Puigdemont, y debajo que escriba bien grande: «SE BUSCA».


Publicado el 19/12/2023 en Okdiario

Progresistas, democráticos… y un poco etarras


 

Con ocasión del desarme de la banda asesina ETA en 2017, el que gracias al PSOE va a volver a ser de nuevo alcalde de PamplonaJoseba Asirón (EH Bildu), dijo que «estoy persuadido de que, como ha habido distintos tipos de violencia y, consecuentemente también, diferentes tipos de víctimas, si algo une a todas, a Tomás Caballero (concejal de UPN asesinado por ETA en 1998) o a Germán Rodríguez (abertzale muerto por un disparo de la Policía en 1978), es que sus familias tienen el mismo dolor»; igualando así a las víctimas con los verdugos. En mayo de este año 2023 el Ayuntamiento de Pamplona celebró un pleno en la que los grupos municipales recordaron a Tomás Caballero, concejal muerto a tiros en la puerta de su casa cuando se dirigía a trabajar al consistorio. Todos menos EH Bildu, de Joseba Asirón, que se negó a apoyar un texto de recuerdo que ni siquiera incluía condena hacia sus asesinos.

A este Joseba Asirón de EH Bildu es al que el PSOE va a volver a hacer alcalde de Pamplona a través de una moción de censura contra la actual alcaldesaCristina Ibarrola, de Unión del Pueblo Navarro, quien resultó ganadora de las últimas elecciones municipales. Un nuevo pacto entre PSOE y Bildu que se suma a los del Gobierno Foral de Navarra, presidido por la socialista María Chivite desde 2019 gracias a la abstención de Bildu; y a los del mismo Pedro Sánchez, quien ya logró sacar adelante su moción de censura contra Mariano Rajoy gracias a los votos a favor de Bildu, volvió a ser investido en 2019 con sólo 2 votos de diferencia, 167 síes frente a 165 noes, gracias a que los 5 diputados de Bildu se abstuvieron, y de nuevo en 2023 ha sido investido gracias a los 6 votos a favor de Bildu. «Con Bildu no vamos a pactar, si quiere se lo digo 5 veces, o 20. Con Bildu no vamos a pactar. Con Bildu, se lo repito, no vamos a pactar», prometió Pedro Sánchez en la campaña electoral de 2015.

Para mostrar su apoyo al nuevo pacto entre el PSOE y Bildu en el Ayuntamiento de Pamplona, ha dicho el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, que así «habrá en España otra alcaldía más progresista en nuestro país y una menos de derechas» y que él no tiene «ningún problema con que un partido progresista democrático de este país se haga con una alcaldía de una capital de provincia de España». Lo de progresista y democrático lo ha dicho en relación a Bildu, hay que aclararlo porque resulta difícil de comprender que se refiera así al partido heredero de los asesinos de los socialistas Fernando Múgica, Fernando Buesa, Ernest Lluch y hasta un total de 11 militantes socialistas que se encuentran entre las casi 1.000 víctimas mortales de la banda asesina.

El único motivo por el que no podemos decir que Bildu sea ETA y los tengamos que llamar herederos o sucesores de la banda terrorista, es porque así lo sentenció el Tribunal Constitucional gracias al voto de su presidente, el masón Pascual Sala, que rompió el empate en una votación en la que los 6 magistrados elegidos a dedo por José Luis Rodríguez Zapatero con el objetivo de legalizar sus pactos con ETA, se impusieron a los 5 que estaban a favor de mantener la resolución del Tribunal Supremo que había ilegalizado todas las candidaturas de Bildu al considerar que éstas se enmarcaban dentro de un proyecto «gestionado, dirigido, coordinado y articulado por el complejo ETA – Batasuna». Esa decisión política los convirtió en un partido legal, pero no les borró los precedentes etarras.

Todas las asociaciones y colectivos de víctimas del terrorismo han denunciado repetidamente que EH Bildu ha justificado en numerosas ocasiones los atentados de ETA, han incorporado en sus filas a numerosos etarras condenados, nunca han rechazado la violencia etarra, y han promovido infinidad de actividades de homenaje a los terroristas. Y todo esto no es algo del pasado, sino que sigue pasando hoy en día. Covite registró 547 actos de apoyo explícito a ETA a lo largo de 2022, lo que supuso un aumento del 139% respecto a 2021. Los progresistas y democráticos dirigentes de EH Bildu no han condenado nunca ni uno de esos actos e incluso los han promocionado y participado en ellos.

El actual líder del progresista y democrático Bildu es Arnaldo Otegui, con u entre la g y la i, como se pronuncia en español y como lo escribieron en sus sentencias los jueces que lo han condenado hasta en 4 ocasiones porque fue uno de los terroristas de ETA político-militar que se pasaron a ETA militar. Su portavoz en el Congreso es la progresista y democrática María de las Mercedes Aizpurua, que también fue condenada por la Audiencia Nacional a un año de prisión por apología del terrorismo. Y en las pasadas elecciones autonómicas y municipales, los progresistas y democráticos socios del PSOE llevaron en sus listas a 44 candidatos condenados por terrorismo, de los que siete eran asesinos sanguinarios.

Pedro Sánchez ya ha explicado que él hace de la necesidad virtud y, como necesita sus votos, dice que le parecen tan democráticos los herederos de ETA como los golpistas catalanes. Sus votantes deben estar muy satisfechos de estar representados por alguien con tan poca vergüenza.


Publicado el 14/12/2023 en Okdiario

Gazpons


 

En abril de 2014, siendo Joe Biden vicepresidente de Estados Unidos, su hijo Hunter, que unos meses antes había sido despedido de la Armada estadounidense por dar positivo en cocaína, fue contratado para la junta directiva del mayor productor de gas natural de Ucrania, Burisma Holdings. La empresa era propiedad del oligarca ucraniano Mykola Zlochevsky, que también fue ministro y ocupó otros altos cargos políticos, y que se encuentra fugado de las autoridades ucranianas acusado por haber intentado sobornar a los fiscales para que retiraran todos los cargos en su contra por lavado de dinero, evasión fiscal y corrupción.

Burisma Holdings pagaba a Hunter Biden más de 80.000 dólares mensuales a pesar de su completa falta de experiencia en el campo de las energéticas, en la época en que su padre era el hombre clave del presidente Barack Obama para Ucrania. En el ordenador portátil de Hunter Biden, cuyo disco duro acabó en manos de la prensa, apareció un correo electrónico verificado, en el que Hunter Biden hablaba con un asesor de Burisma, acerca de una reunión concertada con su padre. Se sospecha que éste podría ser el único motivo por el que la empresa gasista le pagara.

En octubre de 2017, siendo Esteban González Pons un influyente político del PP en Bruselas, vicepresidente del grupo del Partido Popular Europeo y portavoz del PP en el Parlamento Europeo; su hijo, Esteban González Guitart, que acababa de terminar unos meses antes la carrera de derecho y un máster de ESADE, con sólo 25 años, fue fichado como representante en España de la compañía energética rusa, Gazprom. Dicha empresa es la mayor compañía de Rusia, maneja una estratégica llave del suministro de gas en Europa y está controlada de forma personal por Vladimir Putin, quien la ha convertido en su ariete de política exterior.

Con sólo 25 años, recién terminados sus estudios y sin la menor experiencia, el hijo de González Pons fue representante legal en España de la macroempresa de Putin entre octubre de 2017 y diciembre de 2019, mientras su padre era vicepresidente del Grupo Popular en el Parlamento Europeo. Al frente de la filial de Gazprom en España, que dirige sus negocios gasistas en Iberoamérica, estaban su director mundial y un ex agente de la Embajada de Rusia en Madrid. Pero el hijo de González Pons dice que no sabía que le habían otorgado esos poderes notariales, que nunca los ha usado y que jamás tuvo ninguna relación con esa empresa ni con nadie de ella.

El Partido Popular le resta importancia a este nombramiento y lo enmarca como una práctica que ellos dicen que es habitual entre los grandes despachos de abogados que trabajan con multinacionales; ya que el hijo de González Pons trabajaba entonces para el bufete internacional Baker & McKenzie. Aún no ha aparecido ningún disco duro de algún ordenador portátil perdido en el que se encuentren correos electrónicos que acrediten la relación con su padre. Lo que sí se puede comprobar fácilmente es que, una vez que su hijo dejó de ser representante legal de la filial española de Gazprom, Esteban González Pons endureció sus declaraciones públicas contra Vladimir Putin, acusó a Rusia de tener a la Unión Europea como objetivo y llegó a calificar de tirano al líder ruso.

Parece evidente que la gasista ucraniana Burisma Holdings pagaba al inexperto hijo de Joe Biden para intentar que, a cambio, su padre les otorgara un trato favorable. Siguiendo el mismo razonamiento, no parece muy razonable que la filial de Gazprom en España contratase al inexperto hijo de González Pons sin esperar recibir nada a cambio, como tampoco es muy lógico que una empresa otorgue sus poderes a un chaval de 25 años al que ni siquiera informa de lo que ha hecho ni de qué se espera de él a cambio. Desde antiguo es sabido que la esposa de César no sólo debe ser honesta, sino que, además, debe parecerlo. De los hijos de los políticos parece que nadie había escrito nada, por mucho que apeste la cosa.


Publicado el 12/12/2023 en Okdiario

Iglesias y Montero quieren seguir siendo castuza


 

Restándole los 5 diputados que acaban de anunciar su paso al Grupo Mixto, a Sumar le van a quedar otros 26 escaños en el Congreso, que están en la línea de los 23 que consiguió Santiago Carrillo para el Partido Comunista de España en 1979, o los 21 que logró Julio Anguita con Izquierda Unida en 1996; y que se corresponden con un porcentaje de poco más del 10% de los votos. A nivel nacional, para saber el respaldo que tiene la extrema izquierda, hay que sumarle otro 4% más para añadir los votos de ERC, Bildu, BNG, etc., pero nos quedaríamos siempre por debajo del 15% de ultras comunistas, cifra que siempre me va a parecer alta, por el carácter genocida y antidemocrático de esa despreciable ideología totalitaria, pero que tenemos que asumir que es contra la que hay que lidiar.

Lo que se salió completamente de esa «normalidad» fue lo que pasó en España en los 7 años que van desde el 15 de mayo de 2011, fecha de la manifestación que dio inicio al movimiento 15-M de ciudadanos indignados por las consecuencias de la crisis económica de 2008; y el 16 de mayo de 2018, que fue el día en que OKDIARIO destapó en exclusiva que la pareja líder de Podemos, Pablo Iglesias e Irene Montero, se habían comprado en Galapagar un casoplón escriturado en más de 600.000 €, con piscina y parcela de 2.000 m2, valorado en más del doble de esa cifra. En aquel período, Podemos y sus segundas marcas -En Comú Podem, Compromís y En Marea- llegaron a conseguir en 2016 un impresionante 21,15% de los votos que se convirtieron en 71 diputados.

A partir de esa exclusiva de OKDIARIO que supuso el punto de inflexión en la trayectoria de la formación de extrema izquierda liderada mesiánicamente por Pablo Iglesias; sus resultados fueron volviendo a la «normalidad», bajando hasta 43 diputados en abril de 2019, descendiendo a 39 en noviembre de ese mismo año, hasta llegar al suelo de los 31 diputados de 2023, que son a su vez la suma de los 26 de Sumar y los 5 de Podemos. En apenas 4 años, el comunismo ha perdido más de la mitad de la representatividad que llegó a tener durante los años en los que Pablo Iglesias logró engañar a tantos pardillos españoles.

Lograron pasar de un 10% de respaldo electoral, que es lo que histórica y sociológicamente corresponde en España a un partido de extrema izquierda de carácter nacional, a superar el 20% antes de comprarse el casoplón, sólo porque engañaron a la gente. Y lo hicieron en un doble sentido. En primer lugar hicieron creer que la formación morada no era comunista, aunque Pablo Iglesias provenía del comunismo más rancio, lo cual no podía negarse, ya que existían infinidad de grabaciones que lo atestiguaban; sino que era un nuevo tipo de movimiento progresista que representaba a “la gente”, un concepto popularizado en las acampadas del 15-M y que venía a ser algo así como el pueblo que se distingue de “la casta” dirigente. Y ese fue el segundo engaño. Iglesias y Montero hicieron creer a sus votantes que ellos nunca iban a dejar de ser como los perroflautas acampados en la Puerta del Sol y que no cambiarían sus pisitos de Vallecas, que no tendrían niñeras, chóferes, ni guardaespaldas.

Y ahora que ya ninguno de los dos puede seguir disfrutando de los privilegios de la casta; ahora que el que llegó a ser vicepresidente del Gobierno tiene que andar pidiendo donativos para su Canal RED de televisión que no ven ni sus familiares, y que la madre de sus hijos ya ha dejado de manejar el milmillonario presupuesto de un ministerio de Igualdad desde el que se ha despreocupado de sus nefastas estadísticas de maltrato a las mujeres, dedicándose sólo a excarcelar a violadores y pederastas, y teniendo que vivir de la indemnización de 24 meses por haber sido ministra; ahora la pareja pretende mantener y alargar sus privilegios convirtiéndose en eurodiputados durante al menos cuatro años más.

El cónsul romano, Cicerón, decía que «de hombres es el engañarse y de locos persistir en el error». Una idea similar, atribuida habitualmente al decimosexto presidente de los Estados Unidos de América, Abraham Lincoln, dice que «puedes engañar a todo el mundo algún tiempo, puedes engañar a algunos todo el tiempo, pero no puedes engañar a todo el mundo todo el tiempo», cita que, aunque quizá no sea literal, parece encajar bien con el contenido de algunos de sus discursos. En cualquier caso, una vez que ya ha quedado claro que el ticket electoral Iglesias–Montero no se diferencia en nada de la castuza que decían que venían a combatir, que su ideología sigue siendo la extrema izquierda antiespañola más rancia, que su ambición de poder es egoísta y personal, que a todos han engañado y que sólo pretenden dinero, posición y poder; si los españoles vuelven a votarles y hacerles eurodiputados, tendremos que concluir que el refranero español es mucho más sabio que Lincoln y que Cicerón juntos, porque entonces lo que sería verdad es que «el hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra».


Publicado el 07/12/2023 en Okdiario

El Senado no debe tramitar la amnistía


 

Hace unos meses, el 23 de marzo de 2021, cuando Pedro Sánchez no necesitaba los votos de Puigdemont para levantar su muro que impide gobernar a la derecha; la Mesa del Congreso de los Diputados decidió, con los votos del PSOEPP y Vox, no admitir a trámite la Proposición de Ley Orgánica de Amnistía y resolución del conflicto político entre Cataluña y el Estado español, que había sido presentada por ERC, Junts, el PDeCAT y la CUP. Esta decisión se basó en el informe que había elaborado previamente la Asesoría Jurídica del Congreso, dirigida por el letrado mayor de las Cortes Generales y secretario general del Congreso de los Diputados, que entonces era don Carlos Gutiérrez Vicén, quien ha sido sustituido hace un mes.

En su informe jurídico, los letrados del Congreso afirmaron que la amnistía no consistía en otra cosa que en un «indulto de carácter general» camuflado, que están expresamente prohibidos por el artículo 62.I de la Constitución. Para llegar a esta conclusión afirmaron que la proposición de ley pretendía que «queden amnistiados todos los actos de intencionalidad política, cualquiera que fuera su resultado, tipificados como delitos o como conductas determinantes de responsabilidad administrativa, llevadas a cabo desde el 1 de enero de 2013 y hasta el momento de la entrada en vigor» de esta norma, previendo que «se entenderá como intencionalidad política cualquier hecho vinculado a la lucha democrática por la autodeterminación de Cataluña». Argumento jurídico que es totalmente trasladable a la actual propuesta socialista.

Para evitar que los mismos letrados del Congreso que en marzo de 2021 informaron en contra de la amnistía rechacen la propuesta actual, el PSOE ha sustituido como letrado mayor de las Cortes a don Carlos Gutiérrez Vicén por Fernando Galindo, quien hasta ese momento era un alto cargo de la ministra y portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, y que antes de eso había sido vocal del PSOE en la Junta de Distrito de Chamartín del Ayuntamiento de Madrid; y además está casado con la directora general de Relaciones con las Cortes del Ministerio de Presidencia que dirigía entonces el socialista Félix Bolaños. Motivo por el que a nadie le extrañó ver al nuevo letrado mayor de las Cortes, Fernando Galindo, aplaudiendo como un diputado socialista más durante el sectario mitin que Francina Armengol soltó en la Sesión de apertura de la XV legislatura.

El único argumento jurídico por el que, cuando ahora Pedro Sánchez necesita los votos de Puigdemont para ser investido, los letrados del Congreso han hecho un informe que permite a la Mesa del Congreso tomar en consideración una Proposición de Ley de Amnistía que hace unos meses consideraron inconstitucional, es porque el PSOE ha sustituido al letrado mayor por un ex alto cargo socialista, casado con una alto cargo socialista, que aplaude los discursos más sectarios de la socialista Armengol. No hay más.

Pero una vez que el Congreso apruebe la amnistía, la Proposición debe ser remitida al Senado, donde existe otra mesa que tiene a su vez otra asesoría jurídica dirigida por un letrado mayor del Senado, don Manuel Cavero Gómez, que lleva ejerciendo su cargo ininterrumpidamente desde hace 21 años, cuando lo nombró el entonces presidente del Senado, Juan José Lucas, del Partido Popular. Los reglamentos del Congreso y del Senado dicen prácticamente lo mismo acerca de la tramitación de proposiciones de ley. Así, por ejemplo, el artículo 31. 4º del Reglamento del Congreso afirma que corresponde a la Mesa «calificar, con arreglo al Reglamento, los escritos y documentos de índole parlamentaria, así como declarar la admisibilidad o inadmisibilidad de los mismos». Por su parte, el Reglamento del Senado en su artículo 36. C señala que es función de la Mesa «calificar, con arreglo al Reglamento, los escritos y documentos de índole parlamentaria, así como decidir sobre su admisibilidad y tramitación». Prácticamente calcado.

En base a su Reglamento y a la Constitución española, cuando Sánchez no necesitaba los votos de Puigdemont, los letrados del Congreso informaron en contra de la tramitación de una inconstitucional Proposición de Ley de Amnistía. Ahora, los letrados del Senado sólo tienen que copiar sus argumentos para hacer un informe igual al que hicieron los letrados del Congreso en 2021, con el que la Mesa del Senado, con mayoría absoluta del Partido Popular, pueda rechazar admitir a trámite esta nueva Proposición de Ley de Amnistía. No existe ningún motivo para que el PP no vote ahora lo mismo que votó en 2021 y rechace en el Senado una amnistía como la que entonces se negó a tramitar en el Congreso. Hay que resistirse al golpe.


Publicado el 05/12/2023 en Okdiario