Francina Armengol debe dimitir para ir preparando su defensa


 

En la trama de las mascarillas en las que está siendo investigado Koldo, el asesor de Ábalos al que el PSOE pretende usar de cortafuegos, juega un papel trascendental la también socialista presidenta del Congreso, Francina Armengol, que pagó 3,7 millones de euros por unas mascarillas fake que ordenó almacenar cuando se enteró de que había sido presuntamente estafada, pero que tardó tres años en reclamar esa cantidad y no lo hizo hasta justo el día antes de que la popular Marga Prohens la sustituyera en el cargo. Para comprender perfectamente los motivos por los que el cese de Armengol como presidenta del Congreso y su expulsión del PSOE deben ser inmediatos, voy a simplificar la cronología de los hechos que han sido denunciados por OKDIARIO.

El 25 de abril de 2020, en plena pandemia, durante la segunda prórroga del primer estado de alarma, el Gobierno balear de Francina Armengol recibió un correo electrónico de la empresa Soluciones de Gestión SL, patrocinada por Koldo, el ayudante de Ábalos, en el que le ofrece 1.480.600 mascarillas FFP2 que le estaban llegando a Barajas desde China.

El 29 de abril de 2020, por vía de urgencia, el Gobierno balear de Francina Armengol formalizó el pedido por 3,7 millones de euros, mediante un procedimiento sin publicidad y sin buscar otras ofertas.

El 25 de mayo de 2020, una vez recibidas las mascarillas, el Gobierno balear de Francina Armengol envió al Centro Nacional de Medios de Protección (CNMP) dependiente del Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (INSST) del ministerio de Trabajo, una muestra de las mascarillas recibidas, para su obligatoria evaluación.

El 8 de junio de 2020, el CNMP remite el resultado de sus análisis al Gobierno balear de Francina Armengol, informando de que las mascarillas compradas a la empresa patrocinada por Koldo, el ayudante de Ábalos, «no cumplen con los requisitos de una mascarilla FFP2 y en consecuencia de su equivalencia KN95, que fue el tipo ofrecido por la empresa». Tras recibir este informe, el Gobierno balear de Francina Armengol procede a retirar estas mascarillas de sus centros sanitarios y ordena que sean almacenadas.

El 12 de agosto de 2020, dos meses después de haber sido informada de la estafa y de haber ordenado retirar las mascarillas, el Gobierno balear de Francina Armengol emitió un certificado de conformidad con el pedido que le había solicitado la empresa patrocinada de Koldo para así poder concurrir a otras contrataciones públicas. En el certificado se hace constar que el contrato de las mascarillas fake se había ejecutado «correcta y satisfactoriamente».

El 22 de octubre de 2020, tres meses y medio después de haber sido informada de la presunta estafa, la Oficina de Prevención y Lucha contra la Corrupción en las Islas Baleares, dependiente del Parlamento de Baleares, controlado también por Francina Armengol, emitió un informe de fiscalización del impacto de la crisis de la Covid en el sistema de contratación pública de Baleares en el que se oculta que se habían pagado 3,7 millones de euros por unas mascarillas fake que no se podían usar.

El 19 de julio de 2022, el Gobierno balear de Francina Armengol hizo entrega a la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, de toda la documentación solicitada por la Fiscalía Anticorrupción, en relación con su investigación sobre el contrato de 3,7 millones de euros con la empresa patrocinada por Koldo.

El 28 de mayo de 2023 se celebran elecciones al Parlamento de las Islas Baleares, en las que Francina Armengol pierde su Gobierno.

El 6 de julio de 2023 la candidata del PP, Marga Prohens, logró ser investida nueva presidenta de Baleares gracias a la abstención de los ocho diputados de Vox. Ese mismo día, tres años después de haber recibido el informe del CNMP en el que se le advirtió de que había sido presuntamente estafada; un año después de conocer que la Fiscalía Anticorrupción está investigando ese contrato; y un día antes de dejar de ser presidenta de Baleares, Francina Armengol, firmó el expediente para reclamar ese dinero.

El 7 de julio de 2023, Marga Prohens (PP) tomó posesión del cargo de presidenta del Gobierno balear.

Durante 3 años, las mascarillas compradas por el Gobierno balear de Francina Armengol a la empresa patrocinada por Koldo, el ayudante de Ábalos, han permanecido almacenadas porque no cumplen con los requisitos de una mascarilla FFP2. En ese tiempo, el Gobierno balear de Francina Armengol ha certificado que el contrato de las mascarillas fake se había ejecutado correcta y satisfactoriamente. Asimismo, el Gobierno balear de Francina Armengol ha ocultado esta presunta estafa a la Oficina de Prevención y Lucha contra la Corrupción en las Islas Baleares. Y sólo el día antes de ser sustituida en su cargo como presidenta de Baleares, Francina Armengol firmó el expediente para reclamar ese dinero, a pesar de tener constancia de que la Fiscalía Anticorrupción llevaba más de un año investigando.

Con independencia de las responsabilidades penales que puedan derivarse de todos estos hechos, una persona que ha ocultado durante tanto tiempo que había sido presuntamente estafada por una trama vinculada al que entonces era el ministro de Transportes y Secretario de Organización de su partido, no puede ocupar el puesto de presidenta del Congreso que representa la tercera autoridad de España. Francina Armengol no es ya que esté bajo sospecha, sino que todo apunta a que debe ir preparando su defensa.


Publicado el 29/02/2024 en Okdiario

Sánchez premia a los clientes de Koldo


 

El PSOE quiere usar a Ábalos como cortafuego para que el incendio causado por el caso Koldo no acabe churruscando a Pedro Sánchez y así, sin estar ni siquiera imputado, la Comisión Ejecutiva Federal del partido se ha convertido en juez y fiscal para juzgar y condenar al que durante la pandemia fue número dos de Pedro Sánchez en el Gobierno y en el partido, enseñándole la puerta de salida.

El sacrificio resulta imprescindible, porque la relación de Pedro Sánchez con Ábalos y Koldo ha sido tan directa y estrecha durante todos estos años como para haber dejado en manos del primero la responsabilidad de defender en el Congreso la moción de censura que presentó en 2018 contra Mariano Rajoy. Pero aún mayor fue la responsabilidad que dejó Sánchez en manos de Koldo, poniendo en sus manos durante dos noches los avales de militantes socialistas que le permitieron ser candidato a las primarias de 2017.

Se pretende apartar a Pedro Sánchez de estos dos políticos tan cercanos a él y a los que se relaciona con el cobro de comisiones millonarias en contratos con distintas administraciones socialistas en lo peor de la pandemia. Pero va a ser difícil que Ábalos sirva para justificar la manera como Pedro Sánchez ha ido premiando uno tras otro a todos los socialistas responsables de las administraciones públicas que se convirtieron en clientes de Koldo, pagando, presuntamente, sobreprecios millonarios por unas mascarillas que en ocasiones resultaron inservibles.

El principal cliente de la koldosfera, nombre con el que popularmente se ha bautizado esta trama de corrupción, es el ministerio de Transportes, dirigido entonces por el propio José Luis Ábalos. En julio de 2021, Pedro Sánchez, sorprendentemente y sin dar explicaciones, cesó a Ábalos como ministro de Transportes y a la vez lo hizo abandonar la Secretaría de Organización del PSOE. Pero a pesar de apartarlo tan bruscamente de ambos cargos, lo recompensó volviéndolo a poner de número dos por Valencia en las listas del Partido Socialista para las elecciones generales del 23 de julio, e incluso lo propuso como presidente de la Comisión de Interior del Congreso de los Diputados, lo que mejora sustancialmente su sueldo, coche y despacho.

Otra de las administraciones socialistas que hizo negocios con la trama de las mascarillas fue el Servicio de Salud de Baleares, cuyo Gobierno presidía entonces Francina Armengol. La recompensa con la que Pedro Sánchez la ha premiado ha sido ascenderla a presidenta del Congreso de los Diputados después de que perdiera las elecciones autonómicas; cargo que representa la tercera autoridad de España y que está retribuido con 236.710,04 euritos cada año.

También pagó supuestamente mascarillas con sobreprecio a esta trama corrupta el Servicio Canario de Salud, con un Gobierno presidido por el socialista Ángel Víctor Torres, que también perdió las elecciones autonómicas de mayo de 2023 y que ha sido recompensado por Sánchez ascendiéndolo a ministro de Política Territorial y Memoria Democrática con una retribución anual que acaricia los 80.000 euros.

Marlaska, desde el Ministerio de Interior, también adjudicó a la trama corrupta de las mascarillas 3,5 millones de euros de su subdirección general de Gestión Económica y Patrimonial. Como premio, Sánchez lo ha mantenido en su cargo de ministro a pesar de haber sido reprobado por el Congreso y por el Senado; de su nefasta gestión de la tragedia de la valla de Melilla; de que su ministerio ha sido condenado por el Supremo por sus ilegales expulsiones de menores desde Ceuta a Marruecos; de que su destitución del coronel Pérez de los Cobos ha sido revocada por el Tribunal Supremo; y del escandaloso desmantelamiento de la unidad OCON Sur, que ha acabado con el asesinato de dos guardias civiles en Barbate. Pedro Sánchez mantiene en su puesto a Marlaska, el de las mascarillas de Koldo, caiga quien caiga.

Y la quinta administración socialista relacionada con la koldosfera es el mismísimo Ministerio de Sanidad, bajo las órdenes de Salvador Illa que, a través de la dirección del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (INGESA), adjudicó la compra de material sanitario en pandemia a la misma empresa Soluciones de Gestión, relacionada con la trama de Koldo, mediante un contrato que ahora investiga la Fiscalía Europea. El premio para Illa ha sido nombrarlo primer secretario del Partido Socialista de Cataluña y candidato a la presidencia de la Generalitat, que lo ha convertido en el jefe de la oposición de Cataluña.

Francina Armengol, Ángel Víctor Torres, Fernando Grande-Marlaska y Salvador Illa han sido recompensados por Pedro Sánchez después de haberle comprado mascarillas a la trama corrupta del mismo Koldo al que dejó a cargo de sus avales para las primarias del PSOE. El cortafuegos Ábalos parece poca cosa para tanta llama que acosa a Sánchez como presidente de la koldosfera.


Publicado el 27/02/2024 en Okdiario

Koldo es el PSOE de Sánchez


 

Ayer fue detenido el socialista Koldo García Izaguirre por su presunta participación en una trama corrupta de venta de mascarillas durante la pandemia de coronavirus que, según estiman los investigadores, podría estar implicado en fraudes en contratos por más de 50 millones de euros. Mis primeras noticias sobre este tal Koldo son de principios de 2020, cuando la vicepresidenta y mano derecha del dictador Nicolás Maduro, Delcy Rodríguez, cargada con 40 maletas, hizo escala en España camino de Qatar. Entonces supimos que el ministro de Transporte, José Luis Ábalos, se presentó en Barajas de madrugada acompañado de este tal Koldo quien, tras marcharse el ministro, se encargó de acompañar a Delcy, custodiado por 20 agentes de Policía Nacional y Guardia Civil, en la zona Vip de la Terminal Ejecutiva de Barajas, pese a que tenía prohibida su entrada en territorio Schengen.

Fue a partir de ese momento cuando empezaron a publicarse noticias por las que comenzamos a saber quién es este Koldo que parecía un simple portero de discoteca pero, sorprendentemente, cobraba su sueldo como miembro del consejo de administración de la empresa pública Renfe Mercancías. Supimos que no tiene estudios ningunos y que su currículo profesional arranca como vigilante de seguridad y portero de un club de alterne de Pamplona, donde al parecer conoció al actual secretario de organización del PSOE, Santos Cerdán, que fue quien lo fichó como chófer del partido, lo metió en la lista para concejal de Huarte (Navarra), y se lo presentó a Ábalos, que lo fichó como escolta y acabó colocándolo en el Consejo de Renfe y a su mujer, Patricia Úriz, como ayudante de secretaria en el ministerio.

Para Pedro Sánchez, Koldo García Izaguirre es «socialismo de raíz» y «un ejemplo para la militancia». Así lo define el 23 de junio de 2014 en una publicación de Facebook en la que también dice de él que es «uno de los gigantes de la militancia en estas tierras navarras». Posteriormente, cuando en 2017 Sánchez vuelve a presentarse a las primarias del PSOE, después de que el partido se deshiciera de él por intentar pactar con Podemos, los proetarras y los independentistas, supimos que este tal Koldo se llevaba a su propia casa por la noche los avales de militantes socialistas que le permitirían ser candidato, según cuenta el mismo Sánchez en su Manual de Resistencia.

Koldo es la mano derecha de Ábalos y hombre de la total confianza de Pedro Sánchez y Santos Cerdán, pese a que ya entonces había sido condenado dos veces por la justicia. La primera por unos hechos ocurridos en 1991, cuando trabajaba como vigilante de las obras de un vertedero en Navarra y, en una manifestación contra dicha construcción, propinó una paliza al conductor de un camión que obstruía la calzada, rompiéndole varias costillas, los huesos de una mano y causándole diversas contusiones, por lo que fue condenado a dos años, cuatro meses y un día de cárcel, aunque no entró en prisión porque Aznar lo indultó. Su segunda condena fue en 2011, por agredir a un menor de edad la noche que España ganó el mundial de fútbol.

Hay muchos más escándalos protagonizados por Koldo. Como el follón que montó en 2019 en un pub de Mérida, acompañado de Ábalos y sus escoltas. O cuando en 2020 pagó en efectivo, con billetes de 500 euros, una factura de 1.800 euros de gastos por los masajes y las botellas de Moët & Chandon de una juerga de Ábalos con sus escoltas en Canarias.

Las supuestas mordidas en contratos para la compra de mascarillas derivan todas de contratos con las administraciones socialistas de los ministerios de Transportes, dirigido por Ábalos; el de Interior de Marlaska; así como las comunidades autónomas de Baleares, presididas por la hoy presidenta del Congreso, Francina Armengol; y Canarias, cuando la presidía el actual ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres.

Por tanto, son los socialistas Pedro Sánchez, Santos Cerdán, José Luis Ábalos, Grande Marlaska, Francina Armengol y Ángel Víctor Torres, los que tendrán que dar explicaciones acerca de sus estrechísimas relaciones con este tal Koldo ahora detenido, con un currículo plagado de palizas, peleas, agresiones, condenas, clubs de alterne, pago de juergas con billetes de 500 euros, las maletas de Delcy y ahora, presuntas mordidas pagadas por administraciones socialistas, aprovechándose de las muertes causadas por la pandemia. Muchas explicaciones van a tener que dar los socialistas amigos de este tal Koldo.


Publicado el 22/02/2024 en Okdiario

Feijóo no atrae a votantes del PSOE


 

El PSOE se desangra a borbotones. Tras las pasadas elecciones autonómicas y municipales en las que perdió la Comunidad Valenciana, Extremadura, Aragón, La Rioja, Baleares y los ayuntamientos de Sevilla, Valladolid, Castellón, Palma y otras 11 capitales de provincia; apenas gobierna el díscolo de boquilla García-Page en Castilla la Mancha, Barbón en Asturias y Chivite con Bildu en Navarra. Prácticamente nada para lo que era un mapa de España completamente rojo antes de los pactos de Sánchez con golpistas y proetarras. Su última debacle ha ocurrido este domingo en Galicia, donde ha perdido más de un tercio de sus escaños, bajando de 14 a 9.

Mientras el PSOE se dirige directamente al precipicio, su militancia calla. Las únicas voces discrepantes que se escuchan son las de los jubilados a los que las represalias de Pedro Sánchez en nada pueden perjudicar. Lidera ese PSOE protestón un Emiliano García-Page que generó cierta ilusión con sus primeras críticas, pero que se ha ido desinflando al tiempo que demuestra que simplemente representa un papel de oposición domesticada, cuyas palabras quedan en nada una vez tras otra y que, en el fondo, sólo sirve para legitimar más aún el poder del secretario general del PSOE.

La militancia socialista, la que tiene derecho a voto en sus primarias, está formada por los afiliados que pagan más de 100 euros de cuota al año, que son aquellos que a cambio reciben una contraprestación mucho mayor. Concejales, consejeros, asesores, secretarios, dirigentes de empresas públicas, etc. Todos ellos están perdiendo sus cargos a tal velocidad que deberíamos estar escuchándolos quejarse a voz en grito. Pero no se les oye, porque, desde el Gobierno central, todavía Sánchez puede seguir recolocando a los que permanezcan sumisos. Al que deja de ser ministro lo hace embajador, al que pierde una concejalía lo mete en una empresa pública y a los asesores los enchufa en otro asesoramiento igual de innecesario que el que han perdido. Y todos calladitos sin pensar en cuánto va a poder estirarse esto.

Esa es la penosa explicación de que todos los que hace seis meses opinaban que la amnistía era claramente inconstitucional, como la doctora en Derecho Constitucional, Carmen Calvo, digan ahora que la amnistía es democracia, porque la otorga «el pueblo soberano». Porque a cambio de su indignidad, Sánchez la ha convertido en Presidenta del Consejo de Estado, con un sueldo de 90.383,28 euros anuales, más prebendas. Y cada uno en su escala, toda la militancia del PSOE sigue viviendo de Sánchez, gracias al control absoluto que el secretario general ejerce sobre el partido que lo expulsó a él en octubre de 2016 por anunciar que iba a cometer indignidades mucho menores de las que después ha cometido.

Mientras tanto, una oposición dividida y enfrentada no es capaz de sacar ventaja electoral. En Galicia no ha existido ningún trasvase de voto entre bloques. El centro y derecha, que en 2020 sumó un 50,8% de los votos y 42 escaños; ha bajado el domingo al 50,6% perdiendo un escaño, considerando como oposición de derechas el escaño logrado por Democracia Ourensana (DO), para sumarlo a los 40 del PP. Los votos que han perdido los partidos de la coalición de Gobierno han ido íntegramente dirigidos a la extrema izquierda independentista, representada por el BNG. Los más radicales de entre los votantes gallegos del PSOE, Podemos y Sumar se han dado cuenta de que como más se puede sacar de Pedro Sánchez es chantajeándolo como hacen Otegui y Puigdemont.

El PP de Feijóo no ha conseguido atraer a esos militantes moderados y de centro que sólo en su imaginación siguen quedándole al PSOE. Ni Vox es capaz de crecer atacando al PP. Una vez comprobado, se deberían dejar de repetir los mismos errores elección tras elección y copiar las estrategias que sí le han funcionado a Sánchez. Si el enfrentamiento entre el PP y Vox ya se demostró en las elecciones generales de julio y se confirma ahora en Galicia que no sirve para restarle votos a la izquierda, hay que dejar de equivocarse y presentarse ante el electorado unidos, como el PSOE se presenta de la mano de la extrema izquierda y los independentistas.

Hay muchas formas de hacerlo, desde las coaliciones y las candidaturas conjuntas, hasta el no presentar candidaturas en determinadas circunscripciones o simplemente dejando de enfrentarse entre ellos. El PP debe asumir que ni Vox va a desaparecer, ni sus votantes van a pasarse masivamente al PP. Y los de Abascal deben dejar de intentar crecer presentándose como la oposición al PP. Cada uno con sus propuestas y candidatos, pero sin atacarse entre ellos y sabiendo que la única forma de derrotar a Sánchez es que les vaya bien a los dos.


Publicado el 20/02/2024 en Okdiario

¿Quién abrazará a Marlaska?

 


Coincidiendo con las críticas por el desamparo, abandono y falta de medios en que se produjo el asesinato de dos guardias civiles en Barbate, Marlaska acaba de superar a José Barrionuevo como el ministro del Interior que más tiempo lleva en el cargo. En realidad, Barrionuevo fue ministro durante más tiempo, ya que, tras los más de cinco años y medio que Felipe González lo mantuvo al frente de la cartera de Interior, cambió al ministerio de Transportes, Turismo y Comunicaciones, donde todavía aguantó otros tres años más. Y eso a pesar de que la Sala Segunda del Tribunal Supremo lo había condenado a diez años de prisión y doce de inhabilitación absoluta por el secuestro de Segundo Marey, reivindicado por la organización terrorista GAL, y por el delito de malversación de caudales públicos. Condena por la que sólo pasó tres meses en prisión y de la que fue indultado por José María Aznar.

Los Grupos Antiterroristas de Liberación (GAL) fueron miembros de los cuerpos y fuerzas de seguridad españoles, dependientes del Ministerio del Interior que, junto a mercenarios, practicaron terrorismo de Estado contra ETA y su entorno cuando gobernaba el PSOE de Felipe González.

Perpetraron más de 30 atentados terroristas, incluidos 27 asesinatos y unas 60 personas heridas. En varias ocasiones cometieron errores, como en el caso de Segundo Marey por el que fue condenado Barrionuevo.

A diferencia de Marlaska, y a pesar de su condena y su paso por prisión, el ministro Barrionuevo jamás fue reprobado por el Congreso de los Diputados, como sí lo ha sido el actual ministro de Interior, que acaba de superar su pervivencia en el cargo. El 9 de febrero de 2023, la reprobación de Marlaska salió adelante por su nefasta gestión de la tragedia de la valla de Melilla, la ocultación de información, los datos falsos facilitados al Congreso y sus mentiras vertidas en sede parlamentaria. Hace unas semanas el Tribunal Supremo ha confirmado que la devolución de menores desde Ceuta a Marruecos llevada a cabo por Marlaska en mayo de 2021 fue ilegal y considera que se produjo una expulsión colectiva de extranjeros, prohibida por el Convenio Europeo de Derechos Humanos, dando cuenta de la «absoluta inobservancia» de las prescripciones de la norma de Extranjería por parte del ministerio de Interior, bajo las órdenes de Marlaska.

Pero además de ser reprobado por el Congreso, de haberse demostrado que mintió en el parlamento y de la condena del Supremo por sus expulsiones de menores; el historial de felonías cometidas por Marlaska supera muchísimo al de Barrionuevo. Sólo tenemos que recordar sus viernes negros en los que ha trasladado a cárceles vascas a todos los presos de ETA; el bulo del culo por el que falsamente acusó a Vox de un delito de odio inventado; la destitución como represalia del coronel Pérez de los Cobos, revocada por el Tribunal Supremo; la fabricación de un falso informe policial para acusar a Ciudadanos de las agresiones que sufrió su delegación durante el desfile del Orgullo; su falsa vinculación a Vox con el lanzamiento de una granada en un centro de menores extranjeros… La lista es interminable.

Pero no podemos finalizar esta comparación entre Barrionuevo y Marlaska sin recordar que, cuatro meses antes de que este último ordenase el desmantelamiento de OCON Sur, la unidad de élite de la Guardia Civil que luchaba con éxito contra el narcotráfico en el Estrecho, supimos que el teléfono de Marlaska sufrió un robo de más de 6 gigas con el software espía Pegasus, sin que el ministro haya querido contarnos qué información sensible tenía en su móvil, ni su relación con el repentino cambio de actitud de nuestro Gobierno respecto a Marruecos, origen de la droga que transportaban los asesinos en Barbate de los dos guardias civiles. Felipe González, quizá agradecido porque nunca desveló de quién recibía sus órdenes, se abrazó a Barrionuevo a las puertas de la prisión de Guadalajara, pero la personalidad de Pedro Sánchez no nos permite imaginar una fotografía similar. Lo más probable es que, si algún día Marlaska fuera condenado, nadie iría a abrazarlo a las puertas de la cárcel.


Publicado el 15/02/2024 en Okdiario

Eres un icono, presi

 


La bufona socialista de RTVE quiso luego desviar la atención hacia la palabra «icono» porque esa es la muletilla con la que saludó a todos los que pasaron por la alfombra roja de los Premios Goya. Es cierto, la ridícula presentadora saludaba así, entre eructos y otras gracietas de mal gusto, a cualquier personajillo que le pasaba por delante, lo mismo si era la ganadora de un Goya, como si la confundía con su representante; «eres un icono», decía a unos y otros. Y cuando le contaban que se había equivocado contestaba: «Llevo cinco horas aquí y estoy hasta el coño», y se reía como si supiera que a su audiencia le hacen gracia esas faltas de respeto. Pero la frase completa con la que se refirió al presidente del Gobierno no fue esa: «Eres un icono, presi, ¡te queremos!», es lo que le dijo. ¡Te queremos, presi!

Por supuesto que Pedro Sánchez es un icono, nadie va a discutir algo tan evidente. No estamos hablando de eso. Lo que no entra en cabeza humana es que la presentadora del organismo público de titularidad estatal encargado por ley de «garantizar la información objetiva, veraz y plural, con el compromiso de ofrecer calidad, diversidad, innovación y exigencia ética», se dirija al presidente del que en último término depende su sueldo diciéndole: «¡Te queremos!». ¿En nombre de quiénes se pensará que habla esa comedianta? ¿Quiénes son los que queremos a Pedro Sánchez según ella? ¿Cómo es posible que no la hayan echado ya?

La bufona sabe perfectamente que a ella no la eligieron para presentar la gala de entrega de los Premios Goya por su profesionalidad y mucho menos por su objetividad. En realidad ella no es periodista y no ha llegado hasta donde está haciendo gala de un fuerte compromiso con la verdad y la imparcialidad. Ella no es más que una graciosilla que se ha hecho popular en las redes sociales agradando continuamente a los más poderosos del Partido Socialista.

Así, podemos verla poniéndose de pie para aplaudir como una foca a José Luis Rodríguez Zapatero cuando dijo en su programa de podcast del Grupo Prisa: «Estoy convencidísimo de que va a haber una mayoría progresista en las elecciones». Y asegurando en una emisión en directo para el programa Gen Playz de RTVE dedicado al Orgullo, que no tenía «ninguna duda de la victoria de un gobierno progresista en las próximas elecciones generales».

Haciendo gala de un descarado sectarismo a favor del PSOE es como ha conseguido esta gansa llegar a la alfombra roja de los Premios Goya para desde allí poder gritar en directo: «Eres un icono, presi, ¡te queremos!». Para eso la eligieron a ella. Por eso es por lo que le pagan.

Pero dije al principio que por supuesto que Pedro Sánchez es un icono y que nadie está criticando a la bufona de RTVE por decir eso. Sánchez es un icono de la desvergüenza, de la falta de escrúpulos, de la falsedad, del narcisismo y de la mentira. En la portada de una versión actualizada del tratado político El príncipe perfectamente podría ponerse una fotografía de nuestro presidente del Gobierno, como el icono que mejor representa la personalidad hipócrita y falsaria, calculadora, falta de empatía y que lo subordina todo al propio beneficio; descrita en el siglo XVI por el diplomático florentino Nicolás Maquiavelo. Con sus Ray-Ban puestas a bordo del falcon, Sánchez pretendió imitar al icono de la democracia que representó John F. Kennedy, pero acabó convertido en un simple icono del Cum Fraude. Pedro Sánchez es un icono que pasará a la historia como uno de los gobernantes que más ha competido con Fernando VII por apropiarse del calificativo de felón. Sánchez es un icono de todo lo malo, incluido el rodearse de aduladoras y aplaudidoras como la bufona de RTVE.


Publicado el 13/02/2024 en Okdiario

El odio del sindicalista Toño Abad

 


Toño Abad es un conocido socialista, al que no le va nada mal, ya que a su cargo como responsable confederal del área LGTBI de UGT, suma los de director del Observatorio valenciano contra LGTBIfobia, consejero del Consejo Económico y Social de España y miembro del Consejo Asesor de Radio Televisión Española. Aunque esos son los cargos por los que cobra, a lo que básicamente se dedica Toño es a escupir odio en redes sociales. La última ha sido criticar a los agricultores que se manifiestan estos días, diciendo que «todos esos tractores nuevos se han pagado con subvenciones de Europa y del Gobierno». Que también tiene guasa que un subvencionado sindicalista que las pocas veces que sale de una marisquería, trabaja entre poco y nada; se queje de las subvenciones que recibe un currante que trabaja de sol a sol los 365 días del año, para darle de comer a él.

Pero esta no ha sido la primera, ni será la última barbaridad que ha vomitado el sindicalista valenciano. Se inició mucho antes, pero he de reconocer que yo no empecé a oír hablar de él hasta abril del año pasado, cuando comenzó a recibir mensajes de apoyo de la entonces ministra de Igualdad, Irene Montero y de toda su pandilla porque Toño había publicado un hilo en Twitter en el que denunciaba que dos señoras mayores se habían metido con él y su novio, en un restaurante de Madrid. Y claro, dos chicos jóvenes y fornidos como ellos se habían visto obligados a llamar a la Policía para que les defendiera de tan agresivas ancianas. Sus problemas comenzaron cuando se descubrió que la fotografía con la que ilustraba su hilo había sido copiada de la web del restaurante y cuando los empleados del mismo dieron una versión con menos adornos en la que, al parecer, los insultos y amenazas habían sido mutuos.

A partir de ahí, este señor no ha parado de soltar barbaridades una detrás de otra. A principios de noviembre se lamentó de que la Policía no cargara más fuerte contra los manifestantes que se dieron cita en las inmediaciones de la calle Ferraz y comparó a los que protestan ante la sede socialista con «etarras en los peores momentos del País Vasco». Un par de semanas más tarde, con motivo de la votación de la reforma de la ley trans y LGTBI en la Asamblea de Madrid, escribió: «Los gais de derechas: no podéis dar más asco. Vendidos!»; motivo por el cual está siendo investigado por un posible delito de odio en el Juzgado de Instrucción número 25 de Madrid.

A la semana siguiente, la tripulación de un vuelo de Iberia invitó a la diputada y portavoz de Vox en la Comunidad de Madrid, Rocío Monasterio, junto con una de sus hijas, a que entrara en la cabina para ver desde allí el aterrizaje del avión. La bilis que en esta ocasión vomitó este líder de UGT fue escribir que: «Imagínate que te toca al lado de semejante asquerosa y su hija. Al menos alguien ha dejado de olerlas para volar tranquilo». Y el mes pasado, cuando se conoció el fallecimiento del reconocido humorista Paco Arévalo, este líder socialista de la UGT se despidió de él opinando que: «Nadie echará de menos sus chistes de maricas, de gangosos, de personas con discapacidad y otras bufonadas varias».

Ante tanto desatino, tanta bilis, tanto odio y tanto insulto, cabe plantearse cuales son las razones por las que tanto la UGT, como RTVE y el Consejo Económico y Social no han cesado ya a un representante que, cada vez que se mete en un lodazal, deja manchadas de barro a todas esas instituciones públicas que, inevitablemente y hasta que lo cesen, quedarán unidas al odio que continuamente vomita Toño Abad.


Publicado el 08/02/2024 en Okdiario

Con perdón, Zorra tu madre


 

El 17 de enero de 2014 fue el día en que Pablo Iglesias y toda su pandilla de amigotes, a los que se ha ido cargando uno tras otro, fundaron Podemos aprovechándose de todo el movimiento de perroflautas indignados del 15M. Pocos meses después, en octubre de ese mismo año, la Real Academia Española publicó la vigesimotercera edición de su Diccionario académico que, como novedades, incluía las acepciones de matrimonio como «unión de dos personas del mismo sexo», y de empoderar como «hacer poderoso o fuerte a un individuo o grupo social desfavorecido». El mismo diccionario que define zorrear como «dedicarse a la prostitución».

El verbo empoderar y su sustantivo, empoderamiento, son las traducciones literales de los términos en inglés to empower y empowerment, respectivamente, que llevaban tiempo siendo utilizado por la sociología política de extrema izquierda y que habían sido importados a España por el entorno de Podemos. Pablo Iglesias reclamó a Izquierda Unida en esta época que debían permitir que los ciudadanos participen en la elección de las listas electorales como forma de «empoderar a la gente».

Estoy en un buen momento (zorra, zorra, zorra)
Reconstruida por dentro (zorra, zorra, zorra)
Y esa zorra que tanto temías se fue empoderando
Y ahora es una zorra de postal.

Nebulossa es el dúo valenciano formado por María Bas (Mery) y su marido Mark Dasousa, que regentan una peluquería alicantina, donde ella ejerce también de esteticista. Empezaron con la música en 2018 y su primer y único álbum es de 2021. Ella dice que tiene 55 años y él 47. Llevan 20 años casados y tienen dos hijos, María de 23 años y Neo, de 11. El próximo 11 de mayo representarán a España en la final de Eurovisión que acogerá la ciudad sueca de Malmö, y lo harán cantando Zorra, que ellos dicen que es un himno feminista y de empoderamiento.

Con mucho maquillaje, abusando del sintetizador y aún más del autotune, puede que Nebulossa diese el pego. Pero en directo, Mery canta peor que una urraca y baila menos que un pato mareado, así que han tenido que rodearla de mucho fuego de artificio para que no nos fijemos en que ella no se mueve. La sacan al escenario escoltada por dos bailarines drag queen barbudos vestidos sólo con un corsé tipo tanga para que se vean bien sus prietas nalgas depiladas y así miremos poco a Mery.

Si salgo sola soy la zorra
Si me divierto, la más zorra
Si alargo y se me hace de día,
soy más zorra todavía.

En realidad, la letra de Zorra, que no se nos olvide, significa prostituta, podría haber sido transgresora y reivindicativa a principios de los años 80 del siglo pasado, cuando las punks de Vulpes cantaban aquello de Me gusta ser una zorra que tanto indignó al ABC de Luis María Ansón. Pero casi 40 años después de que Alaska y Dinarama convirtieran en un himno de libertad e independencia su A quién le importa, la letra de Zorra resulta soez, viejuna y cutre. Las podemitas, groupies del macho alfa que las fustiga hasta que sangran, no sólo quieren llegar a casa solas y borrachas, ahora también quieren que las aplaudamos cuando zorrean.

La final de Eurovisión tiene un público eminentemente joven, con un 42,9% de share en niños de 4 a 12 años y un 59,4% en jóvenes de 13 a 24 años; jóvenes que deberían saber que una mujer se empodera demostrando que es capaz de liderar, influir y triunfar, con esfuerzo y tesón. Convertir en un himno progre el zorrear o salir sola de fiesta hasta que se hace de día es poco más que dar un mal ejemplo para la educación de esos niños, pero si eso es lo que querían, deberían haber buscado a alguien que supiera cantar y bailar.


Publicado el 06/02/2024 en Okdiario

Puigdemont necesita a Sánchez


 

En el lenguaje del póker, jugar de farol es engañar al contrario apostando fuerte, como si se tuvieran buenas cartas, para que el otro se acobarde y se retire, dejándote ganar. En general «tirarse un farol» es tratar de aparentar que se posee algún arma o ventaja que en realidad no se tiene, o que se está dispuesto a llegar hasta el final y perderlo todo, para así desorientar o atemorizar al rival y conseguir lo que de verdad se persigue. Los independentistas catalanes llevan más de 10 años jugando de farol y ganando, porque nunca a nadie le han importado las apuestas.

En 2012, cuando Rajoy se encontraba desbordado por los enormes problemas económicos y sociales que había heredado de Zapatero, intentando librarnos de un rescate a la griega; cinco días antes de la violenta manifestación Rodea el Congreso del 25-S, Artur Más se plantó en La Moncloa a exigirle a Rajoy un «pacto fiscal» consistente en un Concierto Económico igual al del País Vasco, tras varios años con un déficit público por encima del 10% anual. Si no se le daba todo el dinero que él decía que «Espanya ens roba», amenazaba con convocar un referéndum de independencia, cosa que una semana más tarde aprobó el Parlamento de Cataluña. O dinero o independencia.

Y desde entonces no han parado de chantajear al resto de España, amenazando con una independencia que les expulsaría de la Unión Europea y del conjunto de países del primer mundo y les convertiría en una república aislada, en la que los más frikis serían felices con sus tractores y sus calçots, hablándose entre ellos en su pequeña lengua minoritaria, renunciando a toda inversión extranjera y convertidos en una colonia de la Rusia de Putin. Y ese chantaje les funciona a base de aparentar que cada vez están dispuestos a llegar más lejos para lograr la independencia, incluso pasando casi cuatro años en la cárcel, como Junqueras; o más de seis años prófugo, sin poder pisar Cataluña, como Puigdemont.

Hace unos días, el secretario general de Junts, Jordi Turull, advertía al PSOE de que, si se negaban al referéndum separatista, habrían dicho «colorín colorado» a esta legislatura. Ahora les anuncia que, si no se aprueba una Ley de Amnistía «integral» que se aplique de manera «inmediata», saltará por los aires el acuerdo de investidura que hizo presidente a Pedro Sánchez.

Puigdemont quiere hacer creer que es capaz de dejar caer a Sánchez, cuando todos sabemos que esa es la única forma que tiene de volver a pisar Cataluña. Es un farol. Todos sabemos que es un farol. Sánchez sabe que es un farol. Tanto Junts como el PSOE saben que es un farol. Pero otra vez se va a salir con la suya, porque lo que exige es algo que no le importa un comino ni a Sánchez ni al PSOE. Es como si uno de los jugadores de esa partida de póker, además de jugar con el dinero de otros, se llevara comisión del dinero que perdiese.

Puigdemont necesita a Sánchez incluso más de lo que éste le necesita a él. Una vez investido, a Sánchez le da igual prorrogar presupuestos y gobernar por decreto. Los Presupuestos Generales del Estado de 2018 se prorrogaron en 2019 y otra vez en 2020. De hecho, no existe ninguna limitación legal para prorrogar los Presupuestos tantas veces como sea necesario, mientras el Gobierno no logre los apoyos suficientes. Lo único que podría preocupar a Sánchez es una Moción de Censura que los de Puigdemont deberían votar junto al PP y Vox, para hacer presidente a un Alberto Núñez Feijóo, que de ninguna manera puede permitirse entregarle lo que Sánchez ya le ha puesto sobre la mesa. Está claro que Puigdemont va de farol, pero como Sánchez no tiene nada que perder, le dejará ganar otra vez.


Publicado el 01/02/2024 en Okdiario