Yolanda Díaz puede enterrar a Podemos


 

Yolanda Díaz podemos llamarla la Fashionaria del Piolet, porque ha conseguido llegar a vicepresidenta y ministra traicionando y dejando tirados a todos los que ha usado para trepar. Todos los partidos por los que se presenta se hunden y sus compañeros pierden sus puestos, mientras su carrera personal sigue ascendiendo pese a que continuamente ha logrado siempre unos resultados electorales desastrosos. Ya ha arrasado con Izquierda Unida en Galicia, con En Marea y con Galicia en Común, y ahora puede enterrar a Podemos. Todos los proyectos de los que ha formado parte han acabado desapareciendo mientras ella lograba ascender, cambiando de estilista, de maquilladora y de peluquera, abrazada melosa a cualquiera que la ayude a subir, pronunciando discursos vacíos que no significan nada, pero suenan bien en ese tono meloso que la caracteriza. No dudará ahora en dejar sus piolets en las espaldas de Pablo Iglesias y sus marionetas, Irene Montero y Ione Belarra, si le sirve para volver a ascender ella.

La conjunción planetaria, que fue como la ex ministra Leire Pajín calificó a la coincidencia en el poder de Zapatero y Obama, puede de nuevo favorecerla. Coincide, por un lado, que Pablo Iglesias ha diseñado una estrategia personal que consiste en torpedear con todas sus fuerzas la coalición entre Podemos y Sumar, difundiendo bulos y mentiras que irriten a unos y otros y planteando exigencias inasumibles por ambas partes, para que finalmente el acuerdo resulte imposible. El que fuera vicepresidente primero pretende que en las próximas elecciones se estrellen todos los partidos de izquierdas para, desde su nueva plataforma mediática, culpar personalmente a todos sus líderes de que la derecha consiga el poder, convirtiéndose así él en el abanderado de una oposición exaltada y violenta que va a pasarse toda la próxima legislatura alterando el orden público e incendiando las calles.

También favorece a los intereses de Yolanda Díaz la sorprendente decisión de Pedro Sánchez de convocar precipitadamente elecciones para el 23 de julio, cogiéndolos a todos por sorpresa y con los deberes sin hacer. No hay tiempo para las primarias con las que los de Podemos pensaban infiltrarse en la nueva coalición, arrasando con los pocos puestos que tienen asegurado un escaño. Todas las negociaciones tienen que hacerse a prisa y corriendo y ahí Podemos pierde toda la ventaja que, en principio, suponía contar con una militancia más numerosa y organizada. Ahora la gallega tiene la sartén por el mango y lo sabe. Las guerrillas podemitas gritan desesperadas en todas las redes sociales implorando una unidad que en realidad sólo significa que suplican que les ofrezcan a los suyos cualquier puesto que puedan aceptar. Díaz se sabe con fuerza para imponer sus condiciones y obligar a Podemos a tragar con ellas.

Si los del partido morado quieren estar en puestos de primera fila van a tener que entregarle todo lo que les queda de valor. El ejemplo más cercano es lo que Cs hizo con UPyD. O se integran en una plataforma liderada por Yolanda Díaz y dejan que ella controle su estructura territorial y sus presupuestos, o van a sentir muy pronto el frío que hace fuera de las instituciones, que coincide con lo que quiere que ocurra Pablo Iglesias. Ni en su trayectoria para llegar a ser ministra y vicepresidenta, ni tampoco en su gestión al frente del ministerio, Yolanda Díaz nunca ha demostrado ser muy lista, la verdad. Pero también es cierto que, hasta ahora, siempre ha logrado que a ella le vaya bien. Si sabe jugar sus cartas, en las próximas horas tiene en sus manos la pala con la que enterrar a Podemos, el mayor peligro que nuestra democracia ha corrido en los últimos 50 años.


Publicado el 08/06/2023 en Okdiario

No hay comentarios:

Publicar un comentario