El portavoz de Ciudadanos en el Congreso, Juan Carlos Girauta,
afirmó este lunes que Ciudadanos prefiere negociar con el PSOE antes que con
VOX. Este fin de semana declararon que “no contemplamos que entren en el gobierno
partidos extremistas”, en referencia a VOX en Andalucía, “hemos dejado claro
que queremos un frente constitucionalista, y esa es nuestra línea roja”, afirmaron.
A las “líneas rojas” de Ciudadanos vamos a tener que denominarlas “líneas rojas
movedizas” porque sabemos dónde están hoy pero nadie se atrevería a apostar
sobre dónde se encontrarán mañana porque ya no se ven señales de las de ayer.
El ejemplo más reciente está relacionado con la extremista TV3 y con los
extremistas partidos separatistas catalanes a los que Albert Rivera llama
“golpistas” al tiempo que se sienta a negociar con ellos un sillón en el Consejo
de Gobierno de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA),
encargado de la gestión de TV3.
Esa “línea roja” les había llevado hace medio año a pedir al Gobierno
de Rajoy que prolongase el artículo 155 para hacerlo efectivo también sobre TV3.
La cadena no se intervino y ahora ellos se sientan en su Consejo. Tampoco ha
pasado un año desde que Juan Carlos Girauta se sentó a negociar con la
extremista Irene Montero para pactar con los extremistas de Podemos una reforma
de la ley electoral a la que esperaban sumar al PSOE. Tras aquel acuerdo ambos
portavoces coincidieron en que mantendrían abiertos canales de coordinación sin
“líneas rojas”. Han versionado la frase que dijo Groucho Marx en la película ‘Sopa
de ganso’; los naranjas dirían: «Estos son hoy mis principios. Pero cuando nos
venga bien tendremos otros». Porque este “cordón sanitario” es la forma como
Ciudadanos calcula que más votos le puede robar al PSOE.
Son muchos los que dicen que Ciudadanos es un partido de
derechas o hasta de extrema derecha. Pero los resultados de las últimas citas
electorales demuestran que su caladero de votos está en el centro izquierda de
donde le quitan votantes tanto al PP como al PSOE, quien a su vez está
recuperando a muchos de los votantes que se le habían marchado a Podemos con lo
que consiguen frenar algo la sangría. No como los de Pablo Casado, que caen en
picado perdiendo los votantes que por la derecha se le marchan a VOX y por la
izquierda a Ciudadanos. Por eso la “línea roja” de Ciudadanos se ha desplazado
esta vez hacia la izquierda, que es donde más votos pueden conseguir, ocupando
la franja que ocupaba el PSOE antes de que se podemizara.
Es evidente que a sus votantes les gusta esta estrategia
electoral, porque les funciona de una forma espectacular. Sus votantes
entienden que todo vale con tal de luchar contra el bipartidismo al que culpan
de todos los males de España, y no están muy ideologizados, más que en
cuestiones básicas, como la lucha contra la corrupción y la defensa de la
Constitución. En todo lo demás consienten que se pacte hoy con quienes ayer
dijeron que jamás lo harían. De esta manera Ciudadanos se puede llegar a
convertir en un PSOE 2.0, un Partido Socialista leal a España y sin las
mochilas cargadas de casos de corrupción y de traiciones como las del golpista
Indalecio Prieto, las del Lenin español, Largo Caballero, las del Zapatero de
la Ley
de Memoria Histórica y del Estatuto de Cataluña o las de éste presidente Cum
Fraude que ha vendido España a los golpistas, los filoterroristas y los
comunistas bolivarianos, a cambio sólo de que le dejen usar el ‘Falcon’. Sería
una fantástica mejora.
Publicado el 18/12/2018 en Okdiario
No hay comentarios:
Publicar un comentario